Al cumplirse el primer año de la presidencia de Javier Milei en Argentina, su gestión ha estado marcada por medidas económicas drásticas que han generado tanto avances significativos como desafíos considerables.
Desde su asunción, Milei implementó políticas de austeridad con el objetivo de estabilizar la economía. Estas incluyeron la eliminación de subsidios en energía y transporte, despidos en el sector público y la suspensión de proyectos de infraestructura. Como resultado, la inflación mensual descendió notablemente, alcanzando un 2,7% en octubre de 2024, el nivel más bajo en tres años.
Sin embargo, estas políticas también han tenido consecuencias sociales adversas. La pobreza ha aumentado, afectando a más de la mitad de la población, y la economía ha entrado en recesión. Se estima que cinco millones de personas han caído en la pobreza durante este período.
A pesar de las dificultades, Milei mantiene una alta popularidad. Su enfoque ha recibido apoyo de figuras internacionales como el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y el empresario Elon Musk.
El gobierno enfrenta el reto de reactivar una economía debilitada y abordar el creciente descontento social debido al alto costo de vida. Las próximas elecciones legislativas serán cruciales para consolidar su poder y avanzar en su agenda de reformas.