Sin ofrecer detalles de las investigaciones realizadas sobre los protocolos, la anestesia y la necropsia aplicada a Bantú, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) resolvió que “no existe evidencia concluyente” para determinar la responsabilidad administrativa de la Dirección General de Zoológicos y Vida Silvestre de la Ciudad México en la muerte del gorila de las montañas que iba a ser enviado a Guadalajara.
Lal Profepa no logró determinar que el manejo aplicado durante el traslado, provocara la muerte del gorila
En un comunicado de prensa, la Profepa indicó “que con las evidencias recabadas y analizadas no se pudo determinar que el manejo aplicado durante el pretendido traslado, provocó una situación de tensión y por consiguiente la muerte del ejemplar”.
Por otra parte, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente dio a conocer que impuso al Zoológico de Chapultepec sanciones administrativas, entre las que se incluyó una multa por 255 mil 640 pesos debido a incumplimientos en su plan de manejo aprobado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como a disposiciones sobre el manejo de mamíferos marinos, al no presentar bitácoras de alimentación, veterinaria y calidad del agua.
Destacó que de igual forma, las autoridades locales no acreditaron la legal procedencia de dos borregos cimarrón (Ovis canadensis mexicana).
Recordó que en la visita de inspección realizada en mayo de 2016, se observó que el área de cuarentena estaba ocupada por animales sanos (por remodelación de sus encierros originales), además de que los planes de atención a contingencias y emergencias en materia de fauna silvestre no estaban debidamente aprobados por la Semarnat
También se reportó en el área de necropsias y laboratorio la falta de higiene, y restos de sangre y tejidos; un número significativo de los medicamentos anestésicos estaban caducos; así como el área de almacén y preparación de alimentos presentaba una gran cantidad de excretas de roedores.
El Zoológico de Chapultepec dio cumplimiento al total de las siete medidas ordenadas, de las cuales tres se obligaba a su cumplimiento inmediato y cuatro en un plazo de 15 días hábiles”, subrayó.
La Profepa agregó que a fin de subsanar las irregularidades, el Zoológico de Chapultepec presentó y ejecutó un plan para colocación de sistemas de marcaje y cumplió con el programa de limpieza en las áreas de patología, necropsias, hospital, laboratorio, almacén y preparación de alimentos.
Los fármacos caducos fueron retirados de los anaqueles de farmacia, ya no estando a disposición del personal médico; se le aplicó tratamiento médico a dos ejemplares: una hembra lobo canadiense que ha sido rehabilitada completamente y un oso de anteojos, que aún recibe tratamiento para eliminar por completo una alopesia en área abdominal, así como cadera y extremidades posteriores”, señaló.
Igualmente, el parque implementó un programa de control de roedores y fauna nociva, observándose trampas con veneno y cambió las lámparas en el área de preparación de alimentos. Se colocaron además tapetes sanitarios y mosquiteros en áreas de hospital y necropsias.