Desde Playa del Carmen, Quintana Roo, donde se reunió con militantes y simpatizantes, la ingeniera se sumó a las voces de ambientalistas que denuncian que esta obra emblemática del Presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha provocado un ecocidio en la selva húmeda.
“El compromiso que hago con los ambientalistas, el compromiso que hago con ustedes es revisar el impacto ambiental que ha generado esta obra, reforestar todas aquellas hectáreas que no se usaron en el tren y que fueron retirados los árboles; 10 millones de árboles talados, cuando el Presidente se comprometió que no iba a talar un solo árbol”, criticó durante el encuentro Fuerza y Corazón por Quintana Roo.
En su mensaje se comprometió a recuperar el valor de la vida, el valor de la verdad, el valor de la libertad y el valor de la prosperidad, como ejes principales de su gobierno.
Agregó que, a diferencia del Gobierno Federal, en su proyecto no derrochará miles de millones de pesos en “obras faraónicas” como el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, la cual no refina ningún barril de petróleo.
Explicó que, como Presidenta de México, las “obras faraónicas” que impulsará en Quintana Roo serán aquellas que beneficien a los ciudadanos y a las familias, como ampliar la carretera a tres carriles y construir un hospital de primer nivel.
