Sic Sac, por: M.A. Elda Clemente Reyes.
“El reciente discurso de Trump no logró elevar el bajo apoyo del público al muro”. Jean-Paul Margot
Pueblo feliz
La felicidad es un concepto que utilizamos cuando existe en
nosotros un gozo pleno. En México el presidente Andrés Manuel López Obrador,
habla de felicidad sustentándola en las encuestas de bienestar del INEGI. Mientras
más cerca esté la calificación al 10, más satisfecha está una persona y más
disfruta su vida.
La afirmación del presidente de ver al pueblo feliz, feliz,
feliz, no es ficticia. Es
verdad que una parte de la población están contentos, respaldados por el
Gobierno Federal, sienten que su carga es compartida y hay ausencia de
orfandad. Pero, no debemos generalizar
porque otra parte de los mexicanos no se siente feliz.
Algunos expertos aseguran que se trata de una felicidad
“subjetiva” al basarse en los beneficios que el ciudadano recibe vía gobierno,
no por el fin último del ser humano.
El debate por saber si estamos frente a un estado de dicha incluye
el análisis de principios y valores, el miedo y el sufrimiento que impactan de manera
negativa el estado de ánimo.
En enero de 2019 de acuerdo al INEGI la calificación que los
ciudadanos le dieron a su ‘felicidad’ fue de 8.4. Las mujeres afirmaron tener
un nivel de bienestar de 8.3, y los hombres reportaron una calificación de 8.5.
Este año, la encuesta telefónica de la felicidad por COVID-19
organizada por El Financiero, arrojó una baja de 11 puntos entre marzo y abril,
al pasar de 57 a 46 por ciento, los que dicen ser “algo felices”, subió́ de 34
a 41 por ciento, y los
que dicen ser “poco o nada feliz” fue de 9, 13 y 11 por ciento. El aislamiento
social y el cierre de actividades productivas son las primeras causas.
En el pueblo feliz del presidente la mayoría tienen acceso a
los apoyos del Gobierno de la República, que antes no tenían, me atrevo a decir
que es una “felicidad institucionalizada”. Seguramente otros que no reciben
algún beneficio comparten esa satisfacción mientras el resto de los ciudadanos podemos
sentirnos contentos por tener salud, alcanzar el éxito o vivir en armonía.
Respeto la afirmación de AMLO pero no hay que generalizar. La
felicidad no se reduce a una simple percepción, para mí es un concepto tan
amplio que mueve nuestras fibras sensibles en sentido positivo, y es universal.
El consejo para los gobernantes es que no crean que el pueblo
es feliz por lo que les dan y reciben, mejor observen el rostro de la gente,
sus gestos, la felicidad no se puede ocultar.
COORDINADOS ISSSTE Y SSA
En la Secretaría de Salud y la Delegación del ISSSTE trabajan
de manera coordinada frente al Covid-19. El compromiso y esfuerzo del personal médico,
de enfermería y administrativo continúa reforzando las medidas de prevención para
hacer frente a la fase 3 en esta contingencia, que hasta el momento no ha
rebasado la capacidad de atención, hospitalización y se encuentran a la
vanguardia en infraestructura.
