Por Marco Antonio Cortez Navarrete
Comienzo exclamando:¡Hasta que el Gobernador de Yucatán habló como Gobernador de Yucatán!, es decir, fuerte, seguro, contundente, categórico y directo…”Al grano”, como diría mi abuelo.
En redes sociales oficiales y medios de comunicación, vi, escuché y analicé su discurso y también hice lo mismo leyendo con detenimiento cuando el documento llegó a mis manos y ante mis ojos.
El mensaje de Joaquín Diaz Mena, titular del poder ejecutivo, fue en el marco de la presentación del Plan Estatal de Desarrollo que lleva el sello de su administración: Renacimiento Maya, 2024-2030.
En el evento, realizado en el Centro de Convenciones Siglo XXI, todas y todos los funcionarios del gobierno que encabeza Huacho así como representantes de los poderes legislativo y judicial, cámaras empresariales, instituciones educativas,alcaldes de los municipios del interior del estado, medios de comunicación e invitados especiales.
Y como también decía mi abuelo: “más claro, ni el agua”, el sanfelipeño les cantó sus cartas a todas y todos los presentes y de refilón a los ausentes.
“Yucatán debe tener servidores públicos en el gobierno y en los ayuntamientos, que actúen con profesionalismo, honradez, vivan en la justa medianía y sepan que su razón de ser es entregar al pueblo los bienes del pueblo”.
El párrafo anterior, estoy seguro, caló hondo, tan hondo como un pozo que busca agua del tercer manto freático ya que los dos primeros ya están muy contaminados…casi podridos.
Conozco poco al gobernador, en esas pocas veces que lo he tratado su educación y amabilidad lo han distinguido y como todas y todos los políticos buscó y logró uno de los cargos públicos más ansiados y anhelados: la gubernatura del Estado.
Digo lo anterior porque es evidente que solo no podría ejercer el cargo y para ello recurrió a políticos de muchas “tribus” que anidaban en el priismo, panismo, perredismos, petismo, verde ecologismo y en el pequeño puñado de auténticos morenistas, corriente que, sabemos, en la entidad se cuentan con los dedos de las manos.
Advirtiendo sobre el exceso de confianza, viajes, vacaciones, y otras muchas actividades lejanas a las responsabilidades como servidores públicos, el gobernante enfatizó en su mensaje:
“Hoy les digo que somos un gobierno transformador y cercano con la gente”. Y más aún Huacho dejó en claro que su gobierno tiene la obligación de escuchar, dialogar y rendir cuentas y aceptar errores y corregirlos cuando es necesario.
“Vamos a trabajar siempre con transparencia, sin burocratismo, para que cada peso del presupuesto se invierta en la solución de las necesidades de la gente, que ningún peso se gaste a capricho porque sería dinero mal invertido”, aseveró dejando mudos y con los ojos y quijada hasta el suelo de muchas y muchos que piensan que el gobierno es un botín a disposición para ser asaltado.
En otra parte Diaz Mena afirmó que quiere en su equipo a servidores públicos con vocación social, con ética, y con compromiso, pero más allá de la eficiencia; una nueva cultura de que no le tenga miedo al pueblo, que no cierre las puertas y que no viva de espaldas a la realidad.
Un mensaje más que llamó mi atención fue que Joaquin Diaz quiere un gobierno transformador que significa cambiar estructuras pero sobre todo mentalidades y precisó que “esto logrará con la participación ciudadana, con decisiones compartidas y una gobernanza humanista, ejercida con ética y cercana al pueblo porque “los problemas siempre habrá y el pueblo nos eligió para afrontarlos y darle solución”.
Cierro este comentario reiterando mi esperanza la misma que estoy seguro miles de yucatecas y yucatecos comparten también para que Joaquin Diaz Mena no tan solo cumpla sus promesas y programas de gobierno sino que mantenga al estado por el camino del bien, del desarrollo, la armonía y la paz social.
Solo así Yucatán a continuará siendo ejemplo nacional y mundial. Crucemos los dedos para que Joaquin cumpla con lo que dice y sobre todo con los hechos…hechos, si. Como Santo Tomás: hasta no ver no creer.
PD. Al hablar de seguridad el gobernador prometió devolver la tranquilidad a todas las colonias y comunidades y se comprometió a seguir impulsando la infraestructura, el equipamiento y la capacitación a los integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública finalizando agradeciendo la colaboración total del comandante Luis Felipe Saidén Ojeda, titular de la SSP, para “continuar cuidando la seguridad de los yucatecos”.
Por hoy es todo. Gracias y no se olviden ser felices.