Por Carlos Capetillo Campos / @capetillocampos
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Todas las tareas del gobierno son importantes, pero hay dos que destacan sobre todas las demás: la educación y la salud. Ambas tienen un impacto fundamental en la sociedad, una a más largo plazo, la educación y la otra de impacto inmediato, la salud.
Podemos considerar que la población si está sana aunque no tenga preparación académica, puede triunfar en la vida. En una de nuestras reflexiones difundimos el texto llamado “el portero del prostíbulo”, que marca como una persona analfabeta pero sana y con voluntad de trabajar, se hace rico.
Sin embargo la educación aunque a largo plazo es indispensable, sobre todo porque la economía global se mantendrá algún tiempo a pesar de los daños a los países más débiles económicamente hablando y eso obliga a que los ciudadanos de todos los países compitan entre sí y con los ciudadanos de otros países que ya están hoy revolucionando los sistemas educativos con miras al futuro y en el futuro las tecnologías de la información, la creatividad y la invención sobresalen sobre las demás.
Poco a poco se han abandonado las asignaturas tradicionales, y hasta las que son sólidas en la formación de los jóvenes como el civismo y los jóvenes y niños manifiestan poco interés en la historia, la geografía a excepción de los lugares donde piensan que irán a pasear. Los teléfonos celulares a su utilidad indiscutible se le suman los daños que han causado en el deterioro del lenguaje, la distorsión de la verdad y la facilidad para difundir las mentiras, las verdades a medias que sin ninguna responsabilidad se difunden y los jóvenes de cualquier condición social o económica pugnan por tener el equipo más sofisticado.
Y todo esto afecta la educación y mientras veamos en muchos estados signos de violencia en la demanda de jóvenes que reprueban la carrera magisterial, pero exigen plazas en automático para dar clases. Pregunto ¿Qué enseñarán a los jóvenes y a los niños que sin duda son la esperanza del país? ¿Cómo secuestrar transportes públicos y quemarlos sin importar los daños que causen al patrimonio de familias trabajadoras y al transporte de personas trabajadores, estudiantes, amas de casa de condiciones modestas que usan este sistema de transporte?
Es indispensable fortalecer los valores personales de los niños y jóvenes.
Que tengan claro como norma que a cada derecho corresponde una obligación.
La vida no son solo derechos.
Y la salud es el patrimonio más preciado de los seres humanos.
Hay que saber cómo cuidarla desde los primeros años para no sufrir en edad avanzada los daños acumulados del descuido.
Y las afectaciones de la salud tienen un enorme costo económico y social.
Costos en pagos a doctores y medicinas, intervenciones quirúrgicas, tratamientos de rehabilitación y hay enfermedades que se han convertido en gran negocio como la diabetes que si bien son descuidos individuales de la persona que lo padece, el sistema de salud ya debió investigar y educar a las personas para cuidarse de este grave padecimiento.
Limitantes a las familias que tienen entre sus miembros a enfermos que padecen las enfermedades del siglo como la diabetes, el cáncer, la artritis, y otras que provocan hasta bancarrotas y para el estado el costo social es enorme, por las pensiones prematuras, el sostenimiento de centros de salud.
Por lo que es urgente que el estado dedique sus esfuerzos a fortalecer centros de investigación a encontrar soluciones a estos males concretos.
Y si cada vez que se quiere imponer una medida de amplio beneficio se tiene que negociar con grupos de presión sobre todo políticos, ajenos al conocimiento de expertos, la conclusión termina deformada, sin utilidad.
Y para terminar nuestra reflexión de esta semana, comentaremos brevemente dos temas que merecen análisis más amplios.
Uno es el tema del sistema anticorrupción, que empieza cuando los senadores, después de largos meses para decidir algo tan necesario como el fiscal anticorrupción, no hacen su tarea, sobre todo cuando la sociedad está convencida de que son un grupo de privilegiados que gravan sobre el presupuesto nacional sin ningún beneficio.
Y el otro, es la campaña por el gobierno del Estado de México, donde un expresidente sin ningún respeto a su posición, agrede a una de las candidatas en campaña.
Campaña que se convertirá en una guerra de lo peor contra lo peor, en lugar de propuestas claras, concretas de beneficio social y para el fortalecimiento del estado.
Los partidos y los candidatas han caído en el juego de los medios amarillistas que han hecho creer que el resultado de las elecciones es el fin del mundo y que hay que ganarlas al costo que sea, total al final la misma sociedad termina pagando los caprichos y los excesos de los candidatos que prometen y prometen pensando que ante la falta de inteligencia y capacidad solo así se posicionan.
