Allí estaba. Perfecta, serena y bella: allí estaba una guitarra española. Duende y alma en su madera noble. Admiradora de Camarón, de Paco de Lucía, de El Pele…
Allí estaba. Una guitarra atemporal. Compás y arte. Estaba allí, en la casa aquella, en la tarde, en el otoño que era verano, en la vida viva.. Entre libros de Lorca y fotografías antiguas..
Creo que el abuelo, o alguien, la tocaba alguna vez. Muy bien. Con ritmo, con temple. Muy bien. Cuentan que aquella noche alguien tocó bajo las estrellas de octubre un tema..
Romance de Talavante se llamaba..
Dedicado a Ale Talavante..
A mi Luis
A los cumpleañeros de octubre
A mi familia
A Bonnie
A las personas mencionadas
Al arte
Y al compás