El congresista demócrata Rubén Gallego, hijo de madre colombiana y padre mexicano, hizo historia al convertirse en el primer latino elegido al Senado de los Estados Unidos por el estado de Arizona, tras derrotar a la republicana Kari Lake, aliada del presidente electo Donald Trump. Con su victoria, Gallego se une a un reducido grupo de latinos en posiciones de poder en el Senado estadounidense.
Gallego, de 44 años, comenzó su carrera política en 2015, cuando fue elegido por primera vez para la Cámara de Representantes de EE.UU. A lo largo de su trayectoria, también ocupó un cargo en el Legislativo estatal de Arizona. Nacido en Chicago y criado en un hogar de bajos recursos, el camino hacia el Senado fue marcado por grandes esfuerzos y sacrificios. En una entrevista con Efe, Gallego recordó cómo, durante su adolescencia, vivió con su madre y tres hermanas en un pequeño apartamento. La pobreza y las dificultades económicas motivaron su ambición de mejorar las condiciones de su familia, lo que lo llevó a ingresar a la Universidad de Harvard, donde obtuvo una licenciatura en Relaciones Internacionales.
A pesar de las dificultades, Gallego se sostuvo trabajando como limpiador y lavaplatos durante su tiempo en la universidad, mientras que también cumplió con su servicio militar en la Guerra de Irak, a partir de 2002. “Estar aquí hoy es un sueño”, expresó Gallego en su discurso de agradecimiento tras conocer su victoria, reconociendo el esfuerzo y sacrificio que lo llevaron a alcanzar tan alto cargo.
La campaña de Gallego se desarrolló en un contexto político marcado por una fuerte confrontación con su oponente, Kari Lake, quien promovió teorías conspirativas sobre el fraude electoral en las elecciones presidenciales de 2020. Lake también atacó el historial de Gallego como representante, acusándolo de apoyar una “invasión” migrante y criticando aspectos de su vida personal, incluido su divorcio. Sin embargo, Gallego no dudó en responder a los ataques, calificando a Lake como una “oportunista” que recurría a engaños para captar el voto.
La victoria de Gallego es significativa no solo para Arizona, sino para la comunidad latina en los Estados Unidos. Con su elección, Gallego se convierte en un símbolo de superación y un referente para los latinos en la política estadounidense. “Es un pionero”, declaró Linda Sánchez, presidenta del comité de acción política de la bancada hispana en el Congreso. Además, su elección es celebrada por organizaciones defensoras del medio ambiente, como Climate Power En Acción, que destacan el compromiso de Gallego con una economía basada en energía limpia y en la mejora de las condiciones de vida de las comunidades.
Gallego ocupará el puesto vacante dejado por la senadora Krysten Sinema, quien en 2022 dejó el Partido Demócrata para convertirse en independiente y anunció que no buscaría la reelección en 2024. Aunque la victoria de Gallego no cambia la mayoría republicana en el Senado, el demócrata sumará una nueva voz importante para su partido en la Cámara Alta.
Tras conocer su triunfo, Gallego escribió en su cuenta de X: “¡Gracias, Arizona!”, mientras su oponente, Kari Lake, aún no se ha pronunciado públicamente sobre los resultados.
La elección de Gallego marca un hito en la política de Arizona y en la historia del Senado de los Estados Unidos, reflejando el creciente poder de la comunidad latina en el ámbito político estadounidense.