Mérida, Yucatán, a 18 de julio de 2024.- Por la reciente temporada inédita de lluvias torrenciales en Mérida y en gran parte del estado de Yucatán, ha florecido masivamente el número de moscas y mosquitos que se refugian en las casas, estanques y áreas específicas que mantengan un lugar apto para su supervivencia, generando una plaga en la ciudad de estos insectos y, por tanto, la molestia de los habitantes.
De acuerdo con algunos especialistas, este incremento exponencial del número de insectos (específicamente de las moscas) se debe a que las nubes cargadas de agua ejercen presión hacia abajo, obligando el descenso de estos a la superficie. No obstante, este hecho también es producto de las acciones artificiales del hombre que alteran el equilibrio del ecosistema.
Por supuesto, cualquier aparición masiva de moscas en una zona es causa-efecto, significando que una población o zona inestable en la higiene ocasiona el boom de poblaciones de moscas; también, se suma el poco tratamiento y continuidad de limpieza en las calles por parte de las autoridades.
La acumulación de desechos, las recientes lluvias y ahora el aumento de las temperaturas son algunas de las causantes de este repentino brote de la plaga, aunque la basura es una variable importante para la reproducción de las larvas, causando malos olores e insalubridad.
Otro de los factores es el aumento de las temperaturas, que posibilita el aceleramiento en los ciclos de vida de estos organismos, mezclado con la abundancia de desechos orgánicos. De hecho, por el calor extremo, las moscas en hogares -llamadas domésticas- pueden vivir más tiempo y colocar hasta 2,000 huevos, aumentando su propagación.
Mucho desecho en poco tiempo fue provocado principalmente por el proyecto del Gobierno del Estado en colaboración con el Ayuntamiento de Mérida “descarrachización”, que, por un descontrol por parte de los ciudadanos, dejando algunos bienes inservibles -incluyendo basura- en los puntos estratégicos, han provocado el alza de las moscas y un hogar perfecto para ellas.
Algunas medidas básicas de aseo principales ante esta plaga son:
- Mantener sus desechos en contenedores cerrados, lavar los pisos de los hogares, resguardar los alimentos para impedir el acceso de las moscas y, si es zona apícola, limpiar los corrales o áreas de animales de manera constante.
- Aplicación de larvicidas en charcos de agua que se forman durante las lluvias como una medida preventiva para evitar el desarrollo de los huevecillos de las moscas.
- Revisar las frutas y verduras expuestas al entorno, ya que pueden tener algún indicio de putrefacción o presencia de moscas pequeñas.
- Uso de mallas mosquiteras (miriñaques) en todas las ventanas y puertas del hogar, impidiendo la entrada de las moscas al inmueble.
- Mantener tapados los alimentos en recipientes y refrigerarlos.
- Limpiar y desinfectar lugares donde hubo manipulación de comida y líquidos del insecto, o donde se posó la mosca.
En los hogares, las moscas son atraídas por los residuos orgánicos en descomposición, como las heces y la carne descompuesta, mientras que las moscas de la fruta buscan sustancias azucaradas y se alimentan de fruta podrida y restos de refrescos y alcohol.
Se debe tomar con mucha responsabilidad la higiene y el tema de la plaga de las moscas, pues pueden generar muchas enfermedades (como los casos de diarrea que se registran en la ciudad), ya que contienen bacterias perjudiciales a la salud, tanto de las personas como de los animales; estas cepas contienen diferentes grados de enfermedades, como el cólera, salmonella, entre otras, por lo que tomar las medidas preventivas con seriedad imposibilita el desarrollo de estos virus y de los insectos.
Con información de José Enrique Avilés Laines.
