Un glaciar en la Antártida ha despertado la atención de científicos tras ser captado “desprendiendo humo” en una imagen satelital de la NASA. Sin embargo, lejos de tratarse de humo real, el fenómeno corresponde a una niebla marina formada por el choque de corrientes de aire frío y seco con agua más cálida en la superficie del océano, lo que crea una apariencia similar a volutas de humo sobre el glaciar Pine Island.
Este fenómeno, aunque usual en lugares como los Grandes Lagos cuando una ráfaga fría choca contra el agua relativamente cálida, es menos común en la Antártida debido a las bajas temperaturas y frecuentes coberturas nubosas en la región. Según los científicos, el aumento de vientos fuertes en el área ha facilitado que aguas cálidas lleguen a la superficie, acelerando el proceso de condensación y produciendo la espesa niebla observada desde el espacio.
El glaciar Pine Island, una masa de hielo vital en la Antártida Occidental, se ha visto afectado en las últimas décadas por el aumento de temperaturas, retrocediendo rápidamente y contribuyendo significativamente al nivel global del mar. Este fenómeno de niebla resalta la complejidad de los procesos en el hielo antártico, que, según estudios recientes, podrían alcanzar puntos de inflexión que aumenten el riesgo de retroceso irreversible en varias décadas si las temperaturas globales continúan aumentando.
Científicos señalan que el proceso de derretimiento acelerado del glaciar Pine Island podría representar solo el inicio de cambios críticos en la región, a medida que las capas de hielo pierden estabilidad por el calentamiento global, lo cual tendría repercusiones directas en el aumento del nivel del mar a nivel global.