Sinaloa, uno de los estados más afectados por la violencia en México, ha vivido un aumento significativo en la inseguridad durante las últimas jornadas. Según la Fiscalía General del Estado, en solo cinco días se han registrado al menos 15 personas asesinadas, como resultado de enfrentamientos armados entre grupos del crimen organizado y fuerzas de seguridad.
Culiacán, la capital del estado, y otras localidades como Guasave y Mazatlán, han sido los principales escenarios de estos violentos incidentes, que incluyen balaceras, ejecuciones y enfrentamientos en zonas urbanas y rurales. Las autoridades han iniciado 12 investigaciones por homicidio y 14 por secuestro, algunas de las cuales han resultado en la localización con vida de dos personas. Además, se han reportado robos de vehículos, un indicador de que los delitos patrimoniales también han aumentado.
El incremento de la violencia se atribuye a luchas internas entre facciones del Cártel de Sinaloa, que disputan el control de la región. Ante la situación, el gobierno estatal ha reforzado la presencia de las fuerzas federales y suspendido actividades escolares en algunos municipios como medida preventiva.
