Yucatán se encuentra enfrentando una plaga de langostas centroamericanas (Schistocerca piceifrons piceifrons), que ha comenzado a afectar cultivos en diversas regiones del estado, particularmente en áreas cercanas a la capital, Mérida. Esta plaga de insectos voladores ha invadido tierras agrícolas, poniendo en riesgo la producción de diferentes cultivos que son vitales para la economía local.
El Comité Estatal de Sanidad Vegetal de Yucatán (Cesvy), en conjunto con otras autoridades yucatecas, ha puesto en marcha un plan integral para combatir esta plaga que se ha dispersado por varios municipios del estado. Según informes de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), se han realizado fumigaciones tanto terrestres como aéreas para frenar la expansión de la plaga. Estas medidas se han concentrado en un área de 135 hectáreasafectadas por las langostas.
El control ha consistido en tratar 21 mangas (grupos de langostas voladoras) y un manchón (una concentración de insectos que aún no tienen la capacidad de vuelo) en varios puntos de la geografía yucateca. Aunque no se mencionan todos los municipios en donde se han llevado a cabo estas intervenciones, se sabe que las labores de fumigación han sido fundamentales para frenar la propagación de la plaga.
La plaga ha ocasionado grandes pérdidas en plantaciones de maíz, frijol, y hortalizas, que son esenciales para la producción local y la seguridad alimentaria en Yucatán.
Además de las fumigaciones, se están implementando estrategias preventivas en las áreas de mayor riesgo. Las autoridades han instado a los agricultores a estar alerta y notificar cualquier signo de langostas en sus terrenos para poder realizar tratamientos rápidos. Se recomienda que los agricultores revisen regularmente sus cultivos, especialmente en las zonas más vulnerables, y actúen inmediatamente ante la presencia de los insectos.
Las autoridades también están promoviendo el uso de prácticas agrícolas que dificulten la proliferación de las langostas, como la modificación del suelo y el uso de barreras físicas que puedan desalentar la llegada de estos insectos. La participación activa de los productores es crucial para mitigar los daños y evitar una mayor propagación.
El Cesvy, en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Rural y la Dirección de Protección y Sanidad Agropecuaria, ha convocado a los productores a mantener una comunicación constante con las brigadas de control para asegurar una respuesta eficiente ante la plaga. En este sentido, se ha resaltado la importancia de las denuncias oportunas de cualquier avistamiento de langostas, lo que permitiría implementar rápidamente los protocolos de fumigación.
Además de los esfuerzos institucionales, el gobierno estatal ha solicitado a la población en general mantener una actitud vigilante. Aunque las langostas son más comunes en áreas agrícolas, también podrían presentarse en zonas urbanas, lo que podría generar incomodidad y afectar la vida cotidiana. Ante la posible llegada de las langostas a zonas no agrícolas, las autoridades recomiendan que los habitantes sigan las instrucciones de los medios oficiales y eviten intentar controlar la plaga por sí mismos.
Las autoridades de Yucatán están comprometidas en la protección de los recursos agrícolas del estado, así como en la preservación de la seguridad alimentaria. Con las medidas de control ya en marcha y el involucramiento de los productores, se espera que la plaga de langostas sea contenida antes de que cause daños irreparables en la economía agrícola de la región. La acción rápida y coordinada entre el gobierno, los agricultores y la sociedad será crucial para garantizar el éxito de los esfuerzos de control.
