El fenómeno japonés de las Grandes Ligas, Shohei Ohtani, está a las puertas de inscribir su nombre en la historia del béisbol al acercarse a un récord sin precedentes: 50 jonrones y 50 bases robadas en una sola temporada. Este logro no tiene antecedentes en la MLB, y Ohtani se encuentra en una posición privilegiada para convertirse en el primer jugador en alcanzarlo.
Ohtani, conocido por su versatilidad tanto como bateador designado como lanzador, ha deslumbrado durante la presente temporada al liderar la liga en diversos apartados ofensivos. Con cada jonrón y cada robo de base, el jugador de los Los Angeles Angels se acerca cada vez más a este hito que ningún otro jugador ha logrado, ni siquiera los grandes nombres del béisbol, como Babe Ruth o Barry Bonds.
Hasta ahora, varios jugadores han alcanzado 50 jonrones o 50 bases robadas por separado, pero nunca en una misma temporada. Si Ohtani logra esta hazaña, no solo reforzará su estatus como uno de los jugadores más completos de la historia, sino que también revolucionará los estándares de lo que un pelotero puede hacer sobre el diamante.
En lo que va de temporada, las estadísticas de Ohtani reflejan su dominio en ambas facetas del juego, demostrando por qué es considerado uno de los más grandes talentos de las últimas décadas. Su habilidad para combinar poder, velocidad y destreza técnica le ha permitido destacarse tanto en el plato como en las bases.
Con este récord en la mira, la expectativa sobre el rendimiento de Ohtani en los últimos juegos de la temporada regular es altísima. Tanto los aficionados como los analistas del béisbol esperan con ansiedad cada turno al bate y cada intento de robo de bases, sabiendo que podría estar muy cerca de escribir una nueva página dorada en la historia de la MLB.
De concretarse este logro, Ohtani no solo sería recordado como el primer jugador en conseguirlo, sino que también reforzaría su candidatura para el premio de Jugador Más Valioso (MVP), un reconocimiento que ya ha ganado previamente.
