Editorial La Revista Peninsular
El periodismo es una actividad imprescindible en la
actualidad. Su función de obtener, interpretar, tratar y difundir información
de relevancia, hace que ocupe un rol central en la democracia pues le brinda
herramientas a la sociedad para que pueda ejercer plenamente sus derechos.
Debido a esto, varios analistas consideran al periodismo como el “Cuarto
Poder”, en referencia a los tres poderes públicos comprendidos por el Poder Legislativo,
el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial.
A pesar de la importancia que tiene esta actividad
profesional en los Estados contemporáneos, existen algunos lugares en los que es
más seguro ejercerla que en otros. Esto se debe a que la labor del periodista
puede afectar los intereses de determinados entes de poder como el gobierno, la
delincuencia organizada o agrupaciones sociales. Si en un país hay altos
índices de violencia y represión, es probable que los periodistas sean
vulnerables a la censura y a las agresiones.
México es uno de los países del mundo en los cuáles es
más peligroso ejercer el periodismo. Desde hace varias décadas, los periodistas
han sido víctimas de violencia y censura por llevar al cabo su trabajo. Esta
situación se ha convertido en una grave crisis durante los últimos años, lo
cual ha provocado que prestigiosas organizaciones e instituciones, nacionales e
internacionales, levanten la voz con el fin de exigirle al gobierno mexicano
tomar acciones concretas para garantizar la seguridad de los periodistas.
Entonces, para ser periodista en México es necesario tener
valentía.
Ahora bien, si hay inteligencia, congruencia,
responsabilidad y visión, además de valentía, se pueden dar cosas muy
especiales. Cuando personas dedicadas al periodismo tienen estas cualidades,
surgen espacios que fungen como actores activos dentro del sistema democrático
pues informan, fomentan la crítica, promueven ideología y abren espacios de
diálogo, entre otras actividades democráticas fundamentales.
Si un espacio periodístico de estas características es
administrado correctamente y funda su identidad en preceptos ideológicos
sólidos, tiene el potencial de volverse un símbolo sociocultural dentro de una
comunidad.
Tal es el caso del periódico Por Esto! espacio
periodístico que cumplió 31 años el pasado 21 de marzo en el estadio de la prensa
libre. De la mano de Don Mario Renato Menéndez Rodríguez, el Por Esto! se ha
logrado consolidar como un medio informativo tradicional para la sociedad
peninsular por su objetividad, profesionalismo y noble misión de dar voz a
quienes no son escuchados.
Ahora, bajo la nueva dirección de Alicia Menéndez
Figueroa, este periódico, pilar del periodismo del sureste, emprende una nueva
etapa hacia la digitalización para acercar sus valiosos contenidos a un público
más amplio, siempre procurando sus valores insignia: Dignidad, Identidad y Soberanía.
La Revista Peninsular extiende una respetuosa
felicitación al Por Esto! por sus 31 años. Para el periodismo yucateco, son
objeto de admiración por el profesionalismo con el cual se han conducido por
más de tres décadas; para los yucatecos en general, son motivo de orgullo por
el legado que han construido. Enhorabuena.
