Mérida,
Yucatán, a 15 de noviembre.- El bruxismo se puede
indicar cuando una persona aprieta los dientes, es decir, sujeta fuertemente
los dientes superiores e inferiores, o los hace rechinar deslizando o frotando
los dientes de atrás hacia adelante uno sobre el otro, sin estar consciente de
ello, indicó Gabriel Peraza Gallareta, coordinador delegacional de
Estomatología del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Yucatán.
Peraza Gallareta informó
que del 10 a 20 por ciento de la población tiene bruxismo. En el caso del IMSS
Yucatán en el último mes se presentaron 14 casos nuevos, 10 de mujeres y cuatro
de hombres. “Incluso se ha observado que es un padecimiento más común en las
mujeres, lo que podría ser por el estrés”, apuntó.
El bruxismo puede darse tanto de día
como por las noches, por lo que es importante acudir al servicio de
Estomatología, ya que en caso de no tratarlo se puede poner en riesgo las
piezas dentales.
En la mayoría de los casos, es durante
la noche cuando la persona que padece de bruxismo aprieta sus dientes de
forma involuntaria, lo que puede dañar la articulación de la mandíbula. Se da
particularmente en este momento, ya que al dormir es cuando el estrés acumulado
se llega a manifestar de manera importante.
Los síntomas del bruxismo abarcan
ansiedad, estrés e incluso depresión; así como dolor de oído, ya que las
estructuras de la articulación temporo-mandibular están muy cerca del conducto
auditivo externo y se puede percibir dolor en un lugar diferente de su fuente,
lo cual se denomina dolor referido.
También puede presentarse dolor de
cabeza, sensibilidad muscular, especialmente en la mañana; sensibilidad a los
alimentos muy calientes, fríos o dulces en los dientes; además de insomnio,
dolor o inflamación de la mandíbula.
Los factores que influyen para que el
bruxismo cause dolor y otros problemas maxilares son: el tiempo que se lleva
haciendo esto y qué tan fuerte se aprieten o rechinen los dientes; si los
dientes están desalineados, la postura de los mismos, así como la dieta
personal y los hábitos al dormir.
El bruxismo puede causar fracturas y
muchas otras lesiones dentales; incluso se presentan dolores intensos que
podrían afectar el rendimiento educativo o laboral.
Rechinar los dientes no sólo desgasta
el esmalte que los cubre, sino que también puede ocasionar dolor e incluso la
pérdida de piezas dentarias, además de problemas en articulaciones de
mandíbulas, dolor de cabeza, oídos, cuello y espalda.
No obstante, el bruxismo es una
enfermedad controlable y el Seguro Social lo atiende en su servicio de
Estomatología, donde diagnostican y le dan tratamiento.
En este servicio también se
orienta a cada uno de los pacientes sobre las recomendaciones para mantener una
adecuada higiene y salud bucal.