Línea directa, por: Genoveva Castro Manzanilla.
La movilidad política como siempre, presente abriendo frentes de opinión, análisis y opciones de profundizar en temas actuales, así como remembrar algunas fases del ayer. Yucatán, posee, un asentamiento de gente que participa de modos diferentes, que se une para actuar, otros más prudentes, pero ahí constantes en esos menesteres. Hay, una relación entre los protagonistas y aquellos que comparten las armonías diarias de esas melodías interpuestas para el logro de metas mayores.
La política apasionante, de cuadros, aglutinamiento, complicidades, sociedades, esperanzas, conceptos utilizado en los modelos aplicables por cabezas de grupos o bien, por nuevos liderazgos en el universo de este tema con naturaleza brava, de fuerza, decisión y oportunidades. El mirar traslada sus fuentes en todo el territorio nacional. Motiva a departir puntos clave para compartir, así como realizan desde hace años los puntuales agentes de los palacios; bajo un dictamen de amistad, pluralidad, libertad y conocimiento. De nuevo reunidos, en sus bases cercanas al centro de nuestra ciudad capital de Mérida, presentan causas locales y nacionales, una vez más. Súper pendientes.
El primer tema en la mesa de análisis fue precisamente la expresión en cadena nacional del siempre polémico Diego Fernández de Cevallos Ramos, quien con larga carrera nacional y a sus 78 años varios medios de comunicación lo siguen teniendo como un referente de peso, desde luego, sin mucho que guardar y muy conocida su preferencia para actuar. El político que ha caminado bajo las siglas del PAN sostuvo que no se debería de maximizar las protestas en las calles realizadas el domingo pasado en contra del actual presidente Andrés Manuel López Obrador; pero, tampoco, minimizar.
Expresaron los agentes de los palacios, que, es un derecho ciudadano el manifestar su desacuerdo en contra de cualquier gobernante, y que el ciudadano debería de hacerlo plenamente. En este caso, con muestras de que no se ven a fondo muchas de las promesas que hiciera el gobernante del país, incluso, se atrevió el ex diputado federal, Senador de la República y ex candidato presidencial a decir que en las conocidas ruedas de prensa llamadas popularmente “las mañaneras” ya hay estudios donde se demuestra que hay un 46 por ciento de que no se dicen verdades, que, de ser cierto, ya es preocupante ante un mandatario que pudiera empezar a demostrar un estilo de soberbia, apuntan que expresó, quien fue blanco de sonado secuestro con varias hipótesis sobre lo ocurrido. Bueno, parte de esas libertades de poder expresar lo que se piensa bajo los principios establecidos. Diego, sigue siendo Diego, señaló colaborador editorialista de matutino local.
Otro tema que se tocó fue el anuncio que hiciera el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero al informar que se va a trabajar con nueva forma el caso del escandaloso asunto de aquello que se le llama “La Estafa Maestra” en donde, similar a documentados casos en Yucatán, existen supuestas pruebas y hasta la fecha no ha pasado nada, a pesar de la enorme cifra de millones de pesos que presuntamente fueron saqueados del erario, vaya del dinero de los ciudadanos. En el tiempo de referencia se detallan las también ya muy utilizadas “empresas fantasmas” e incluso el nombramiento de algunas universidades como parte de esas operaciones, que ha dejado a varios millonarios, el tiempo pasa y no hay culpables.
Veterano trabajador de medio de comunicación peninsular, retomó el excelente trabajo de investigación que se hiciera en Yucatán con amplitud de publicación, señales de las formas, nombres, etcétera; pero de la misma manera, ahí van quedando en la impunidad los promotores de las empresas fantasmas, la indicación de supuestas inversiones en negocios, inmuebles, no solo locales sino en otras entidades, viajes al extranjero, placeres y todo lo que se le pueda añadir a un nuevo estatus de vida que no se concebía al entrar hace poco más de seis años a las riendas del gobierno yucateco. Ojalá, así como Gertz Manero decidiera retomar el caso de “La Estafa Maestra”, se pudiera tener eco en la entidad y brindar la rendición de esas cuentas y ejecuciones legales, si fueran los casos, en consecuencia. Ahí tienen a la mano, el trabajo de investigación publicado, y que, posiblemente aún quede más en la computadora correspondiente. Veremos cómo camina ese asunto en lo nacional y si hay similar ánimo o voluntad en lo local. Bien vale la pena estar pendientes todos.
Don Renán Alberto Barrera Concha, presidente municipal de Mérida continúa con ese paso que se ha impuesto en el cumplimiento de su mandato, lo que, además, como consecuencia, le da libre tránsito en ese plan para sus aspiraciones mayores. Se ha dicho que la prudencia lo acompaña, sin embargo, será factor de vital importancia, el no dejar sueltos a sus colaboradores, aun los más cercanos y eficientes. El ser humano suele aprovecharse de esas cualidades para intentar bloquear, perjudicar o humillar como forma de desahogo ante otras limitantes interiores.
Hay que tener la mirada atenta del mayor número de movimientos. Que esa buena conducción no le entre agua a causa de uno que otro despistado disfrazando sus prejuicios personales. Vale la pena, se repite, que no tenga obstáculos la buena marcha de Barrera Concha. Ya en su anterior mandato, tuvo el acierto y la valentía cuando algún funcionario de primer nivel cometiera sonado error, de esos que les salen de sus interiores y complejos, darle de baja, ante el aplauso mayoritario de los meridanos.
Los agentes de los palacios ya con el postre, externan que el presidente municipal en su porcentaje mayor es de buena voluntad. Un político a la inclusión. Dispuesto a llegar a la meta marcada en el horizonte del pueblo yucateco. Ante ello, deberá de repasar con sus colaboradores sus objetivos, aliados, formas, metas y procedimientos. No hay tiempo para la resta, la suma de voluntades y activos fortalecerá esa animada carrera que va creciendo con madurez, trabajo, contacto ciudadano. Y, ahí, desde luego, Renán Alberto, cuenta con la primera aliada y efectiva en su parte, su esposa, la presidenta del DIF, Diana Castillo Laviada quien, con su natural actitud, se ha ganado el reconocimiento a su labor, en buena forma, del ciudadano meridano. Ahora es cuando, concluyeron los asistentes a esta reunión con gran gozo y armonía. Pendientes todos.