La administración del presidente Donald Trump está evaluando la posibilidad de extender la licencia de Chevron para extraer petróleo en Venezuela, revirtiendo una orden previa que exigía a la compañía cesar sus operaciones en el país sudamericano para principios de abril.
En una reunión reciente con el director ejecutivo de Chevron, Mike Wirth, y otros ejecutivos de la industria, Trump manifestó su disposición a reconsiderar la decisión anterior. Además, Washington está considerando imponer aranceles u otras sanciones financieras a los países que compren petróleo venezolano, con el objetivo de dificultar que naciones como China establezcan una presencia significativa en Venezuela y, al mismo tiempo, fortalecer la posición de Chevron y mantener el flujo de petróleo hacia Estados Unidos.
Esta medida también podría presionar al presidente venezolano, Nicolás Maduro, para que participe en negociaciones. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, indicó que tales acciones podrían llevar a Maduro a la mesa de diálogo.
Un portavoz de Chevron comentó que los ejecutivos de la compañía se reúnen regularmente con representantes del gobierno en Washington para abordar asuntos relacionados con sus operaciones, tanto en Estados Unidos como en el extranjero, pero no proporcionó detalles específicos sobre la reunión con Trump.