Una severa tormenta de nieve obligó a desplegar operaciones de rescate masivo alrededor del monte Everest, donde decenas de excursionistas quedaron atrapados en condiciones extremas. Según los primeros informes, alrededor de 350 personas fueron rescatadas satisfactoriamente desde un valle en la vertiente china de la montaña, aunque más de 200 siguen aisladas y a la espera de auxilio.
Los equipos de emergencia se encuentran en constante contacto con quienes permanecen varados, mientras las condiciones climáticas adversas complican las labores. Las autoridades han señalado que el punto de encuentro para muchos de los rescatados fue la prefectura de Tingri, desde donde fueron evacuados hacia zonas más seguras.
A pesar de las dificultades y del volumen de personas afectadas, las tareas de rescate continúan con prioridad ante cualquier cambio brusco del clima. Las autoridades chinas han movilizado recursos considerables para garantizar el retorno seguro de quienes aún permanecen en las alturas.


