El Huracán Beryl ha causado estragos significativos en Texas, dejando a casi un millón de clientes sin electricidad tras tocar tierra en las costas del condado de Matagorda. Clasificado como un huracán de categoría 1, Beryl ha provocado daños considerables en la infraestructura eléctrica, afectando a numerosas comunidades en el área metropolitana de Houston y más allá. Las fuertes ráfagas de viento, que alcanzaron velocidades de hasta 120 millas por hora, y las intensas lluvias han derribado líneas eléctricas y postes, lo que ha llevado a una interrupción masiva del suministro eléctrico.
Casi un millón de clientes se han visto afectados por los apagones, con más de 800,000 personas aún sin electricidad. Los condados más afectados son Harris, con más de 500,000 apagones, Fort Bend con más de 150,000, y Montgomery con más de 100,000.
Los daños a la infraestructura eléctrica son extensos, con numerosas líneas y postes eléctricos derribados. Las autoridades locales han advertido que algunas áreas podrían permanecer sin electricidad durante varios días debido a la magnitud de los daños.
La principal compañía de servicios eléctricos en la región, CenterPoint Energy, ha activado su plan de respuesta de emergencia. Más de 2,000 técnicos y personal adicional han sido desplegados para trabajar en la restauración del servicio eléctrico. Hasta ahora, se ha logrado restablecer la electricidad a aproximadamente 200,000 clientes.
Las autoridades locales han habilitado más de 50 refugios de emergencia para los residentes afectados y han distribuido más de 100,000 botellas de agua y 50,000 raciones de alimentos en las áreas más impactadas. También se han establecido líneas telefónicas de emergencia para asistir a la población.
Las autoridades han emitido advertencias a la población para que permanezcan en sus hogares y eviten salir a menos que sea absolutamente necesario, con el fin de garantizar su seguridad y facilitar las labores de emergencia y recuperación.
Se sigue monitoreando el avance de Beryl y su impacto potencial en otras regiones. Las autoridades instan a los residentes a mantenerse informados a través de fuentes oficiales y a seguir todas las recomendaciones de seguridad.
La prioridad inmediata es garantizar la seguridad de los residentes y trabajar en la pronta recuperación de los servicios básicos. Las comunidades afectadas deben estar preparadas para posibles retrasos en la restauración completa del servicio eléctrico y otras infraestructuras. Este evento subraya la importancia de estar preparados para desastres naturales y de tener planes de respuesta rápida y efectiva para minimizar los daños y proteger a la población.
