Tres eran tres los regalos que más le gustaron al niño de la Reina Inés. En un lejano lugar entre hielos y montañas habitaba un reino muy respetuoso y amable. Era costumbre que en el cumpleaños del pequeño príncipe, el hijo de Inés, los que lo desearan acudieran a palacio con regalos y detalles…
Cada año acudía mucha gente!
Aquel junio el chiquillo cumplía ya diez años, el primero de dos cifras, edad importante. Le obsequiaron juguetes y libros, una bicicleta, un par de zapatillas de deporte, un puzzle… Cosas y cosas, cajas y cajas… Todo muy hermoso y muy del gusto del muchacho. Y fue un día muy bello…
Le llevaron también un perro, le fascinò al nene. Se trataba de un animal chiquitillo y dulce, lametòn y bonito! Luego un matador de toros toreò de salòn para que el crío se deleitara con el arte. Y una muchachilla de piel aceitunada le compuso una canciòn, una muy original y única. Una canciòn para él.
El perro, el toreo y la canciòn fueron los regalos que más sonrisas le arrancaron al chiquillo. Aunque todos le maravillaron!
Dedicado a mi perro, le recuerdo a diario
Dedicado a mi sobrino Hugo que en breve cumple diez años y que es pura bondad
Dedicado a mi hermana, por este 24!
Dedicado a los días largos de este mes, os amo
Dedicado a los que torean y a los que hacen cosas bellas con el toreo y por el toreo
Dedicado a los que componen canciones y también a los que tan bien las cantan
Dedicado a Luisito
Y dedicado a la hermana de Luisito, que tiene diez años
