Por: Lic. Edwin Carcaño Guerra MBA. Coautor: Jorge Alejandro Rojas Torres.
En 1962 el Presidente John F. Kennedy enfrentaba uno de los retos más difíciles de su administración. Lo que hoy conocemos como la Crisis de los Misiles puso al mundo en alerta total debido al peligro de una confrontación atómica entre las dos súper potencias de la época. Nikita Kruschev pretendía poner misiles, con capacidad nuclear, en Cuba para poder atacar a EUA en caso de una nueva guerra. Mientras tanto en la frontera entre China e India otro conflicto estaba ocurriendo: Los Chinos atacaron territorio Hindú.
Los orígenes de la Guerra Sino – Hindú se encuentran en el Tíbet. Cuando la Republica Popular China invadió la región Tibetana la India recibió a muchos tibetanos entre ellos al Dalai Lama. Esto fue visto por el gobierno Chino como un mal gesto de política exterior y las fricciones entre las dos naciones empezaron a escalar. Finalmente el conflicto estalló el 20 de octubre de 1962 y el casus belli fue una región del Himalaya que finalmente fue anexada a China. El conflicto termino en una derrota para el ejercito Hindú.
Para entender mejor las relaciones entre estos dos países hay que comenzar mencionando que son las dos naciones mas pobladas del planeta. Ambas economías compiten entre ellas y los retos internos son muy grandes. Ambas naciones han generado políticas publicas para impulsar el crecimiento y la generación de nueva infraestructura. En el gran proyecto chino de la Nueva Ruta de la Seda la India juega un rol fundamental. Por otro lado en el Conflicto del Mar del Sur de China los hindúes juegan mas cerca de EUA.
China tiene una población de alrededor 1,379,000,000 habitantes mientras que la India tiene alrededor de 1,210,000,000 habitantes. La economía China tiene un GDP de 12 trillones(2017) mientras que la economía hindú tiene un GDP de 2.611 trillones de dólares. China mantiene una tasa anual constante de crecimiento real, mientras India refleja una ligera disminución en su ritmo en los últimos tres años de datos corrientes: China creció 6.9% en 2017 mientras que India 6.7.
En el rubro de PIB (Gross Domestic Product GDP por sus siglas en inglés), en lo que se refiere al “uso final”, destaca India con una mayor porcentaje de consumo doméstico, en contraste con China que tiene una supremacía en cuanto a inversión en capitales. El modelo económico de China es más consistente año tras año sin importar los cambios de liderazgo en el poder ejecutivo, mientras India ha experimentado “convulsiones económicas” como resultado de temas de corrupción y de cambios de visión económica en las transiciones democráticas.
Esta volatilidad en India se refleja en su tasa de inflación de precios al consumidor en comparación con China que deja ver el “control” sobre el sistema financiero. El segmento de exportaciones, China todavía lleva una amplia ventaja a India, tanto en el ranking donde ostenta la primera posición, mientras India la 21. Las exportaciones de India hacia China representan el 4.3% en la relación comercial entre ambas naciones, siendo una cifra significativa en consideración porque se ubica China como el cuarto destino de exportación de bienes procedentes de India.
En las importaciones de India el 16.3% provienen de China, siendo el principal socio en este rubro, seguido de los Estados Unidos de América con el 5.5%, Emiratos Árabes Unidos con el 5.2%, Arabia Saudita el 4.8%, y Suiza el 4.7%.
La relación comercial entre ambas naciones presenta datos relevantes, que indican la clara conexión para el intercambio de mercancías sin dejar de recalcar que también compiten agresivamente por los mercados internacionales. Todo esto y ha sido mencionado en el famoso libro “The World is Flat”.
La relación basada en el intercambio de “commodities”, es una tendencia sólida en las relaciones comerciales entre los diferentes países de Asia, en especial la existente entre China e India. Por su lado la economía de China no tiene a India como uno de sus principales clientes importadores ya que estos son Corea del Sur, Japón, Estados Unidos, Alemania y Australia. El reto mas grande para las dos naciones son sus disputas fronterizas en especial el área de Doklam en donde China pretende construir una carretera y la India lo ha estado impidiendo.