Luis E. Roche / Coach
Propagar el miedo no ayuda a actuar en beneficio de los nuestros, llámese familia, comunidad, sociedad, o país, si realmente queremos hacer una diferencia y que las decisiones de otros no nos afecten o nos impacten menos, tenemos que actuar desde nuestra trinchera para hacer lo que sentimos que es lo correcto.
Pareciera que este principio de año en vez de comenzar con el pe derecho, de manera general en el país empezamos mal. Los problemas que se nos enfrenta como nación y como sociedad tiene muchas aristas que difícilmente se puede concluir en una sola respuesta. Sin embargo, y de manera personal, veo que hay algo en común, el miedo está siendo un factor que nos está haciendo actuar de maneras que en vez de ayudarnos a salir adelante, nos hace lo contrario.
Te puede sonar irónico, incluso te puede caer mal que te diga que no pasa nada. Tal vez no estés de acuerdo conmigo si te digo que la situación que estamos viviendo ahora no es tan trágica como nos la presentan. Vivir en un estado de miedo constante no ayuda a solucionar problemas. Quejarse y comunicar la queja tampoco resuelve el problema. Las decisiones que no nos competen no son nuestro problema. Sin embargo, sé que tal vez esto no lo veas congruente e incluso te moleste más o simplemente no estés de acuerdo conmigo. Y está bien.
Lo que realmente quiero compartir es que el miedo a vivir en una crisis económica, y social, no se va a resolver con compartiendo información vía internet o en redes sociales o aplicaciones tecnológicas del teléfono celular. Debemos de dejar de tener miedo. El miedo es una emoción que se propaga con facilidad, y el miedo paraliza. El miedo, como una emoción primaria también nos ayuda a defendernos, pero lo hacemos con violencia.
El miedo nos ayuda a sobrevivir, esa es su función primaria. En épocas cuando el hombre todavía no perfeccionaba su sistema de comunicación (el lenguaje hablado). Lo que ayudaba era la comunicación sensorial (las emociones). Cuando un miembro del grupo sentía el peligro (miedo) esto se percibía por los otros miembros del grupo. Esto todavía se ve en animales que viven en grupos. Incluso cuando sentimos miedo producimos hormonas que otros animales pueden oler. Como personas, no sentimos esos aromas, pero si sentimos esas emociones. Esto da la alerta al grupo del peligro, y servía para actuar ante el ataque de un depredador o hasta un grupo rival. El miedo nos da esa alerta y prepara al cuerpo para actuar.
Sin embargo, hoy entendemos al miedo como algo más. El ego utiliza el miedo y lo transforma en un estado de ánimo. Deja de ser una emoción, la cual dura solo un instante y hace que dure durante un período de tiempo indefinido, inclusive lo puede hacer permanente. Vivir en miedo es lo que utiliza el ego para separarnos de la dualidad del ser humano, del amor.
Así es, propagar el miedo no ayuda a que podamos actuar en beneficio nuestro y de los nuestros, llámese familia, comunidad, sociedad, o país. Si realmente queremos hacer una diferencia y que el impacto de decisiones de otros no nos impacte o nos impacte menos, tenemos que actuar desde nuestra trinchera para hacer lo que sentimos que es lo correcto. Debemos de hacer un alto a estar reenviando imágenes crueles, a dejar de publicar memes ofensivos, a no retransmitir información que propague el miedo, el terror. En vez de eso, publica propuestas, acciones positivas. Actúa responsablemente en tu trabajo, con tu familia.
Debemos de utilizar la tecnología a nuestro favor y no en nuestra contra. Pareciera que esto no haría efecto por el descontento general. Yo también estoy descontento con muchas cosas que está atravesando mi México. Lo difícil de ver que un cambio pueda ser posible es porque no creemos en la bondad, honestidad, disciplina, entrega, compromiso. Es nuestro miedo a que no es posible que no nos atrevemos a hacer lo que nos toca hacer. Es más fácil pasar una imagen de un muerto en el grupo de whatsapp y en las redes sociales, que hacer el cambio en uno mismo para no ser parte del problema, imagínense que cada mexicano tome esta decisión, ¿Tú que crees que pasaría? Si crees que tú no haces la diferencia, es que porque hay un miedo en ti que no cree que es posible. Mientras que no podamos vernos de otra manera, el miedo se va a apoderar de nuestra mente y así actuaremos. No dejes que eso te pase, porque se lo pasas a otros.
Tú tienes el poder de controlar tu vida… ¡Úsalo!