En la corrida por la oreja de oro, en la ciudad de Pachuca, Hidalgo. El rejoneador Fauro Aloi, abrió la tarde con “Gastador”, de 495 kilos, de la ganadería de Marrón, con el que firmó desde salida una solvente y convincente actuación.
El mando en el recibo para colocar los rejones de castigo. Un toro que tuvo ese fondo de calidad y con el que Fauro apostó por el gran mando y espectacularidad que consiguió firmar con las banderillas. Temple de costado y un valor sereno al citar de frente y batirse en dos ocasiones para continuar con las banderillas. La clase quedó demostrada al templar y mandar a caballo, convenciendo a una afición cautiva que disfrutó de gran manera el quehacer de Fauro que hizo vibrar con un soberbio par a dos manos, en las banderillas cortas pusieron el cierre de esta gran faena de Fauro. El toro tardó en doblar y se esfumó la posibilidad de coronar esta gran actuación. Fue premiado con palmas tras aviso.