Por: José Luis Novelo Ayuso.
“No hay victoria permanente, ni derrota para siempre.” F.C.H.
A escasas hora de que se confirme por la Comisión Nacional de
Procesos Internos de nuestro Instituto Político, lo que para la sociedad,
pero sobre todo para la militancia Priísta, es sabido; el triunfo contundente
de Alejandro Moreno Cárdenas; Gobernador con licencia del vecino estado
de Campeche; me quedo con dos lecciones que nos ha dejado este difícil y
desgastante proceso interno de elección de la Dirigencia Nacional.
Primera, que a pesar de los descalabros electorales constitucionales,
el PRI, es el único partido político a nivel nacional que no tiene temor de
someter a una consulta, amplia, nacional, la elección de quienes dirigirán
y encabezarán sus destinos durante 4 años en todo el País, a diferencia de
otros partidos que basan su democracia interna y por ende la elección de
sus respectivas directivas en un selecto, acotado y recortado grupo para
evitar cualquier situación que se les pueda salir de las manos; el PRI no
tiene miedo de avanzar con su militancia nacional, no tiene miedo de
avanzar con la sociedad en general. La participación de poco más de 1
millón, 730 mil militantes hablan por sí solos de la fuerza y calidad moral
con que la nueva Dirigencia llega al Comité Ejecutivo Nacional; no hay
ninguna duda, el PRI le tiene que seguir apostando a la fuerza y respeto de
su militancia para recuperar los espacios perdidos y ponernos nuevamente
en el ánimo de una sociedad, hoy por hoy, desencantada del sistema de
partidos políticos y de las autoridades que de ellos emanan; el pueblo sabe
y nuestro partido también, que cuando le das el Poder a la persona
equivocada, este no la transforma ni cambia, simplemente la muestra
como es porque ya lo obtuvo, esta sin duda es la primera gran lección que
nos deja este proceso, con la militancia todo, sin la militancia nada.
La segunda lección que nos ha dejado nuestra jornada interna del 11
de agosto y no por ello menos importante, es la de que los resultados no
nos dejan vencedores ni vencidos, nos deja una amplia participación de un
priísmo que aletargado y cansado nos demuestra que aún puede caminar,
la aportación de cada fórmula es importante para mantener la unidad y
llevar a cabo el objetivo y estrategia que ha planteado el virtual ganador
de la contienda, Alejandro Moreno; queremos que la sociedad nos vea
como un partido vivo, como una oposición férrea pero inteligente cuando
se trate de señalar alguna mala decisión al Gobierno Federal; que la
sociedad nos vea como un aliado de ella y del Gobierno, que no su
incondicional, cuando se trate de reconocer algún mérito o acierto al
Titular del Ejecutivo; que la sociedad nos vea como una organización
política incluyente, moderna, propositiva y responsable para sanar las
heridas que producto de la pasión y el momento nos pudo dejar esta
elección interna; que la Sociedad nos vea como un Instituto Político
respetuoso de su militancia, de cada uno de sus militantes que con el
apoyo de ella misma pueden ser su autoridad o su representante, por eso
a unas horas de que se confirme la contundencia de los resultados, es
momento para que cada formula le dé la vuelta a la página, es momento
de cerrar el capítulo; lo que se hizo ahí quedo, lo que se dijo ahí quedo. Es
momento de empezar a escribir otro capítulo, uno más que se cerrara con
nuestra primera prueba federal en el 2021 y que por la militancia, por la
confianza y participación de ellos, merecen que se cierre con nuestro
levantamiento y resurgimiento a mejores posiciones electorales; en esto,
cada formula ya tiene un capital político, apórtenlo, para que con su
Liderazgo sigan siendo protagonistas y partícipes de la Reconstrucción
histórica del Nuevo PRI que requiere México. ¡Es Cuánto!
