Por: Cristina Padín.
Era 27 de junio y el calor caía sin piedad sobre el lugar, una zona fea y gris que no conocería ningún turista. Tal vez alguno interesado más por el alma de las personas que por el típico postureo. Sobre una mesa vieja, en aquella breve esquina, descansaban unas zapatillas que podían llevar allí treinta años. Gastadas, sin color, sin vida.
Treinta años atrás el niño jugaría allí…
En el inicio de un verano largo, infinito.. lleno de sol y de polvo, de tiempo suspendido.. de días sin playa y sin romance a la vera del mar. Otro verano diferente.. y tambièn existente.. Ya no es un niño y su sonrisa cumple años con la misma ilusión que tenía cuando, a sus seis o siete, descubría que el regalo era un balón de
fútbol. Adoraba el fútbol.
Hoy es un triunfador mundialmente admirado.
Puede que de esa misma forma hayan sido los 27 de junio de muchos seres que hoy triunfan gracias a su esfuerzo y su humildad.. en aldeas gallegas de ensueño
donde la temperatura no baja de 42 grados o en sitios perdidos en calles sevillanas donde la opción era lucha y no rendirse. Los 27 de junio que abrían el verano de héroes reales, no de ficción.
Dedicado a Raúl Gonzàlez Blanco, en su cumpleaños. Un ser de verdad
A todos esos valientes que triunfan por su
valía y su valor. En Galicia, en Andalucía..
A la humildad. La prepotencia es asquerosa
A los M: simply the best
A mi mago Talavante
A mi amigo Jm
Al 27 de junio: día especial
A las aldeas gallegas
A las personas que se esfuerzan
A Carmen: un ejemplo. Me ha encantado la
conversación
A mi querido Luis
A Lourdes, en su aventura
A los héroes reales
