Discurso de Carlos
Joaquín del 12 de junio de 2016
Estimadas amigas y
amigos:
La historia no se
equivoca
Quienes la desconocen
o la ignoran terminan por repetir los mismos errores.
Como en la legendaria
Guerra de Castas, el pasado 5 de junio, los chetumaleños decidieron sacudirse
el yugo de sus malos gobernantes.
Con el mismo coraje y
determinación de aquellos mayas encabezados por Jacinto Pat y Cecilio Chi,
terminaron con 12 años de impunidad y corrupción.
Pasaron de la Guerra
de Castas a la Guerra de Votos.
Y a través del voto
ciudadano, la capital de Quintana Roo mandó un mensaje a todo su territorio:
Es la hora del cambio.
Como en ningún otro
lugar del estado, el sufragio chetumaleño le cerró el paso a su opresor y lo
echó del gobierno.
Y eso es lo que vengo
a celebrar hoy con ustedes.
Que esa guerra de
votos en la que Chetumal apabulló a quienes la retaron, hoy se convirtió en una
nueva esperanza,
Una nueva
esperanza de un cambio con rumbo y
responsabilidad.
Una nueva esperanza de
un Quintana Roo más parejo y solidario, con oportunidades para todos.
La alta
responsabilidad que ustedes me confirieron con su voto, me compromete a
trabajar intensamente porque esa nueva esperanza se vaya convirtiendo en
realidad.
Me compromete a actuar
con vocación de servicio, con decencia, con honestidad.
Y aquí delante de mis
hijos, de mi esposa y de mi madre, empeño mi palabra de ser un gobernador que
escuche, que esté cerca de la gente.
Un gobernador que
rinda cuentas y transparente lo que hace el gobierno.
Un gobernador que
respete a sus gobernados y tenga una conducta honorable y tolerante.
Un gobernador que
cuide el dinero de los quintanarroenses y lo aplique con legalidad y eficiencia
en mejorar su calidad de vida.
Que cuide y rescate el
patrimonio cultural, natural e histórico de nuestro Estado.
Que actúe con justicia
y con firmeza.
Que trabaje
intensamente en devolver la paz y la armonía.
No les voy a fallar!!!
Amigos todos:
Hoy es un día
histórico.
Hoy empezamos a
reconstruir el Quintana Roo de nuestros sueños.
De la mano de mi
amigo, Luis Torres, refundaremos y proyectaremos el Chetumal que vio nacer
Othón Pompeyo Blanco en 1898; en un Chetumal que conserve su maravillosa
identidad pero que dinamice su economía y genere alternativas dignas de vida
para sus hijos.
Agradezco
profundamente el voto de confianza que me otorgan y que honraré con trabajo
continuo y con resultados.
Que viva Chetumal!!!


