Por Yazmín Rodríguez Galaz
COMO PARTE DE LAS ESTRATEGIAS DEL GOBIERNO de Yucatán para controlar sus proyectos, acciones y personal, todas las altas y bajas de personal provienen ahora de instrucciones directas del despacho del gobernador Rolando Zapata Bello.
El control administrativo en las oficinas públicas y el departamento de Recursos Humanos de la Secretaría de Administración y Finanzas (SAF), a cargo de la CP Maricarmen Solano Barrientos, viene del despacho del gobernador Rolando Zapata Bello, en donde se autoriza o cancela la posibilidad de contratación o de bajas incluso sobre el personal actual.
Las indicaciones vienen del mismo Ejecutivo estatal y son supervisadas directamente por el jefe del Despacho, Sergio Vadillo Lora.
La intención –de acuerdo a fuentes de la SAF- es impedir los desórdenes en la contratación de la burocracia, reducir gastos y procurar que las nuevas contrataciones sean –mayoritariamente- por contrato o eventuales.
Incluso el mismo titular de la SAF, Alfredo Dájer Abimerhi, está obligado a pasar el “filtro” ante nuevas contrataciones de personal en todos los niveles de la estructura gubernamental.
Los mismos Secretarios y directores de cada área solamente pueden hacer contrataciones vía consulta a la Dirección de Recursos Humanos del Gobierno del Estado y previa supervisión del Despacho del Gobernador.
Esas disposiciones iniciaron desde los primeros días de este año y son parte del control y transparencia a la que, por ley, están sujetas las autoridades federales, estatales y municipales y que también tiene relación con el personal que se contrata.
Por otro lado, y como parte de los ajustes presupuestales, se redujeron las compras y adquisiciones, uso de equipos de comunicación, transporte, viáticos y gastos de combustible.
Asimismo, en la mayoría de las oficinas públicas hay nuevos administradores que son los que realizan auditorías y revisiones mensuales sobre los gastos y compras que se ejecutan en cada dependencia, incluso la adquisición de agua y refrescos.
Estas disposiciones tienen que ver -se aseguró- debido a que en algunas áreas existían compras indiscriminadas y gastos que no estaban sujetos al control de la misma SAF.
No obstante el “centralismo” de esa medida que obviamente representa más tiempo en la aprobación de compras o adquisición de personal, gente de la SAF aseguró que permite tener un control más directo de las finanzas y de todo lo que eroga el gobierno de Yucatán.
Las órdenes de control administrativo incluyen a todas las oficinas públicas dependientes de la estructura del gobierno local.
Y, por lo pronto, no hay contrataciones hasta nuevo aviso, posiblemente para el mes de enero o febrero del próximo año.
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El delegado de la Secretaría de Medio Ambiente, Jorge Carlos Berlín Montero, anda apurando el paso, ya que independientemente de su encargo federal, varios de sus cercanos aseguran que buscará meterse en la cantera de los considerados como posibles candidatos del PRI al gobierno de Yucatán en las elecciones del 2018.
Berlín Montero, quien ha sido diputado federal, líder de la CNC y titular de Desarrollo Rural del Gobierno del Estado, tiene “fans” que le están planteando la posibilidad de que abiertamente diga que aspira a la candidatura para lo cual –en su momento- deberá dejar la delegación de la Semarnat.
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Aunque su nombre ya se insertó como posible carta del PRI para la alcaldía meridana, el joven diputado federal Pablo Gamboa Miner no estaría de acuerdo en “pelear” por esa posición, sino más bien –señalan sus colaboradores- le interesaría la gubernatura o bien, la senaduría.
Gamboa Miner, hijo del coordinador parlamentario del PRI, Emilio Gamboa Patrón, anda más que activo en las redes sociales.
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