Por Yazmín Rodríguez
El PAN y el PRI ya están listos con sus respectivos precandidatos a la gubernatura del Estado y ambos tienen en común, la urgente necesidad de evitar que sus cuadros al interior se fracturen por falta de manejo político y acuerdos.
La jornada electiva apenas empieza y ya se observa que en el tricolor no han podido abonar lo suficiente para que todos los que fueron aspirantes a la candidatura queden satisfechos.
Aunque falta la consabida distribución de posiciones para las corrientes y grupos políticos priistas, la realidad es que el “destape” de Mauricio Sahuí Rivero no dejó contentos a buena parte de los priistas, menos porque representa –por lo pronto- una posible repetición o calca del gobierno de Rolando Zapata Bello.
Y por otro lado, en lo que pareciera una primera pifia del precandidato priista, se desmarcó rápidamente de la ex gobernadora Ivonne Ortega Pacheco y se manifestó total y abiertamente “rolandista”, dejando una grave herida en los miles de votos que representarían los seguidores de la ex gobernadora.
De remate les advirtió que ninguno de ellos tendría cabida en la administración Sahuista –en caso de ganar- o sea, balde de agua fría para todos ellos, en momentos en que deberían estar “restañando heridas”, no haciéndolas más profundas y echándoles sal y limón.
Por otro lado, en Acción Nacional tampoco les está yendo del todo bien, pues aunque el ex alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha acató la disposición de que Mauricio Vila Dosal, sea el precandidato a gobernador, hay otros más que se quedaron en espera de diputaciones federales, senadurías y la candidatura por la Alcaldía meridana.
Tanto el dirigente del PRI Carlos Sobrino Argáez se ha esmerado en decir que hay “unidad” interna como el mismo PAN en voz de su presidente estatal Raúl Paz Alonso, pero la realidad es que las dos principales fuerzas políticas en Yucatán están aún pulsando rupturas serias.
Lo que falta aún por venir no será nada fácil para todos ellos en una elección que de antemano se observa que será altamente competida y que podría ganar cualquiera por escaso margen.
Si ante ese escenario ninguno logra la unidad verdadera –no de mentiritas- seguro es que tendrá problemas. Es cuestión de esperar y dimensionar los tiempos.
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De golpe y porrazo
El líder del Frente Único de Trabajadores del Volante (FUTV) Héctor Fernández Zapata aseguró que la agrupación sindical que encabeza “apoyará con todo” al precandidato tricolor a la gubernatura del Estado, Mauricio Sahuí Rivero, pese a que se dice que el ex secretario de Desarrollo Social no respaldó al entonces candidato del PRI por la alcaldía de Mérida, Nerio Torres Arcila, vinculado directamente a ese gremio de taxistas, por su padre, Nerio Torres Ortiz.
Como se sabe, el papel que juegan los taxistas en los tiempos electorales es importante para el tricolor, pues no sólo representan una cantidad fuerte de votos, sino que también contribuyen a la estructura facilitando el transporte para los votantes de ese partido.
Por lo pronto, los trabajadores del volante le serán “fieles a sus colores” y apoyarán a Sahuí Rivero con tal de retener la gubernatura de Yucatán, al menos eso dicen.
Pablo negocia ir al Senado,
Luego de no ser designado como el abanderado para la gubernatura de Yucatán, el diputado federal Pablo Gamboa Miner aspira a competir por un escaño en el Senado de la República en las próximas elecciones de 2018.
Así lo comentó el propio legislador durante la visita del precandidato presidencial José Antonio Meade Kuribreña a Mérida.
Precisó que haber “jugado” por la candidatura al gobierno del Estado a sus 31 años de edad “fue un honor”. En cuanto a su aspiración por una nueva posición política, podría definirse hasta en enero próximo.
Gamboa Miner señaló que no está resentido por no haber sido “el ungido” y que al contrario, sumará esfuerzos para apoyar a Mauricio Sahuí Rivero.
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Tras darse a conocer que será el actual alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, quien encabece la alianza entre el PAN, Movimiento Ciudadano y PRD “Por México al Frente” en Yucatán, el dirigente del Sol Azteca, Alejandro Cuevas Mena reiteró una vez más que su partido no va con el panista “ni a la esquina”.
El líder perredista ha expresado en muchas ocasiones que no apoyaría a Vila como abanderado del mencionado proyecto pues sería “condenarlo al fracaso”. Se dice que es esa renuencia la que ha dificultado que se concrete esa coalición tripartidista en el estado.
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De esto y más estaremos pendientes.
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