El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció el 14 de mayo de 2025 su decisión de no postularse para un segundo mandato en las elecciones generales programadas para el 17 de agosto. En un mensaje televisado, Arce expresó: “No seré un factor de división del voto popular ni facilitaré un proyecto de derecha fascistoide, que quiere destruir el modelo que hemos construido” .
Arce instó al expresidente Evo Morales a seguir su ejemplo y declinar su candidatura, argumentando que Morales está inhabilitado constitucionalmente para postularse nuevamente. El Tribunal Constitucional Plurinacional ratificó en diciembre de 2023 la prohibición de reelecciones indefinidas, lo que impide a Morales aspirar a un nuevo mandato .
A pesar de esta inhabilitación, Morales ha manifestado su intención de participar en las elecciones, incluso considerando el uso de una sigla partidaria “prestada”. Sin embargo, ha enfrentado dificultades para encontrar un partido dispuesto a respaldarlo, debido al temor de posibles sanciones legales .
La renuncia de Arce y su llamado a la unidad de la izquierda boliviana han generado expectativas sobre la posible consolidación de una candidatura única. En este contexto, el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, ha emergido como una figura destacada. Rodríguez, de 36 años y exdirigente cocalero, ha anunciado su intención de postularse, lo que podría representar una opción de consenso dentro del Movimiento al Socialismo (MAS) .
La situación política en Bolivia se encuentra en un momento crucial, con la izquierda buscando evitar divisiones que puedan favorecer a la oposición en las próximas elecciones. La decisión de Arce y las acciones futuras de Morales serán determinantes para el panorama electoral del país.