Editorial La Revista Peninsular
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la
Federación (TEPJF) declaró válidas las reformas estatutarias que le dan la
posibilidad a Alejandro Moreno de prolongar su mandato en la dirigencia
nacional del PRI.
Hace una semana, comentábamos que el TEPJF aprobó la
decisión que tomó el Tercer Congreso Ordinario de Morena de extender el periodo
de su dirigencia nacional hasta el año 2024. Solo la magistrada Janine Otálora
y el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón votaron a favor de anular esta
determinación por considerar que violentaba los principios democráticos y el
derecho de la militancia a tener elecciones internas libres. Por el contrario,
4 magistrados coincidieron en que Morena tiene la libertad de establecer sus
estrategias previo al siguiente proceso electoral.
En esta ocasión, la magistrada Otálora y el magistrado
Rodríguez Mondragón nuevamente fueron los únicos en posicionarse en contra de
la extensión de mandatado de la dirigencia nacional, ahora del PRI, pues los
demás magistrados del tribunal coincidieron en aprobar dicha determinación.
Esta reforma en favor de la extensión de mandato de la
dirigencia nacional del PRI fue aprobada por el Consejo Político Nacional (CPN)
de dicho partido en diciembre del 2022. Según señalaron varios militantes,
hubieron irregularidades en torno a esta decisión pues no se cumplieron los
requisitos para convocar de urgencia al CPN, además de que no se envió con suficiente
tiempo de anticipación el contenido de las modificaciones que habrían de ser
votadas ni las invitaciones a los consejeros. De igual manera, reprocharon que
se tomaran acciones para armonizar los estatutos partidistas con normas que aún
no se han aprobado, en referencia al Plan B electoral del presidente López
Obrador.
Debido a esto, militantes del tricolor como Claudia
Ruiz Massieu, Miguel Ángel Osorio Chong y Dulce María Sauri acudieron ante las
autoridades electorales para denunciar el abuso cometido.
Es importante aclarar que los estatutos del PRI ya
contaban con la posibilidad de que la dirigencia nacional solicite una prórroga
de mandato al CPN cuando su fecha de salida sea 3 meses antes del inicio del
periodo electoral. Alejandro Moreno se encontraba en la posición de solicitar
dicha prórroga; sin embargo, el Plan B estipula la reducción de los periodos
electorales por lo que, con su aprobación, Moreno se iba a ver imposibilitado
para hacer la solicitud.
Así pues, la modificación estatutaria ajustó el
periodo comprendido entre que termina la dirigencia y comienza el periodo
electoral a 90 días hábiles para que el actual dirigente pueda contar con dicha
opción.
El Consejo General del INE determinó anular estas
reformas estatutarias por considerar que efectivamente hubieron irregularidades
en la convocatoria del CPN y que era incorrecto tomar acciones en respuesta a
leyes aún por aprobarse. No obstante, el TEPJF rechazó dicha determinación pues
consideró que era válido que el PRI se adelantara a esta reforma, así como que
no se crea la facultad de extender la dirigencia, sino que ésta ya estaba
contemplada en los estatutos.
Este es un triunfo para Alejandro Moreno ya que valida
la controversial convocatoria del CPN de diciembre del 2022 y, con ello, cuenta
con la posibilidad de prolongar su mandato al frente del PRI. Para esto, deberá
justificar su intención de mantenerse en el cargo y también necesitará recibir
la aprobación del CPN lo cual no será sencillo, pero tampoco imposible por el
control que ha mostrado tener sobre los órganos de decisión de su partido.
Habrá que estar atentos de cómo evoluciona la vida
interna de los partidos en el marco de los preparativos previos a los comicios
electorales del 2024. Las pretensiones de algunos de los actuales dirigentes
partidistas de prolongarse en sus cargos es evidente, será cuestión de tiempo
ver si se concretan. Por mientras, parece que los militantes deberán hacer uso
de los órganos internos de sus partidos para dirimir controversias ya que la
autoridad electoral, por lo menos el TEPJF, ha demostrado tener una postura en
favor de la autodeterminación partidista.