Por: Marco A. Cortez N.
Benditas redes sociales. ¿Quién ha dicho esto decenas de ocasiones?
Bueno, pues benditas redes, porque guste o no, despiertan la consciencia de todos, hasta de aquellos que no tuvieron oportunidad de estudiar o concluir su educación básica pero que tienen en sus manos un teléfono celular con acceso a las “benditas redes sociales”.
A través de estas herramientas tecnológicas observo y leo lo relativo al asilo que el gobierno mexicano otorgó al ahora ex presidente de Bolivia.
Hay muchas opiniones, pero creo son más quienes manifiestan su desacuerdo con la medida adoptada por el jefe del ejecutivo nacional.
Cierto es que México tiene una enorme tradición de dar asilo a quien o quienes lo soliciten. Argumenta el gobierno anteponiendo el principio de Derechos Humanos… ya si se respetan y aplican es otra cosa.
¿Por qué no Venezuela? ¿Por qué no Cuba? Hoy le decía a un colega que más allá de la tradición pacifista y humanitaria de México las condiciones geopolíticas y sociales en todo el mundo son otras.
México y todo el orbe ya no son lo mismo que hace 50, 30, 20 ó tal vez los últimos 10 años.
Hoy vi un “meme” en las “benditas redes sociales” que decía: “dejamos de mantener a los expresidentes de México para mantener ahora a expresidentes extranjeros”. La verdad, este “chistorete” me llevó a la reflexión.
Hoy en México hay un tema nuevo, uno más, que se suma a la ya larga lista de tópicos que han llevado al cuestionamiento una y otra vez a la actual administración federal.
De entre lo rescatable del gobierno mexicano cito a Marcelo Ebrard, creo que es un acierto su nombramiento ya que ha capeado con elegancia y maestría el embate sobre el tema de asilo y otras situaciones más, como los casos de inmigrantes y el de la familia LeBaron, sin embargo, considero que una sola persona no puede hacer todo en un gabinete integrado por cientos de personas.
Y mientras la opinión pública se desboca con Evo -quien dijo ya que pronto regresará a su país y lo hará con más fuerza- los medios colocan en segundos y hasta terceros términos temas como los debates en las cámaras de Senadores y Diputados, el caso Baja California o los embrollos en Pemex, CFE e INE; solo el caso de la CNDH compitió hoy con Evo -en las primeras planas-, especialmente al tocarse el tema de quien estará al frente de este organismo.
Hoy mismo la prensa nacional señala que ante la presión del grupo parlamentario del PAN y otros opositores al régimen, Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política dijo que habrá una nueva votación.
Monreal expresó que “se accede a reponer el proceso, pero no porque haya habido fraude, No somos tramposos. No señores, sino que esto se trata de una muestra de voluntad política para dar certeza de que los mecanismos del Senado son claros y transparentes”…
Así que de momento se realizará una tercera votación con la misma terna de candidatos: Rosario Piedra Ibarra, Arturo Peimbert y José de Jesús Orozco.
Es así que con Evo la administración federal tiene no un tanque sino una pipa de oxígeno que le permitirá transitar por otros mares con relativa seguridad ¿cuánto tiempo? ¿No sé? Tal vez hasta que haya otro “golpe” similar…
Hasta la próxima
