En un principio la pandemia dibujo una prioridad de salud que fue motivada por las noticias europeas de contagios y muertos que se multiplicaron cada día, ante el miedo cerraron su economía y pocos países que tomaron una apuesta riesgosa de no cerrarla, la mayoría de países lo hicieron pensando que el pico máximo de contagios iba a ser similar al de China pocos tomaron en cuenta que es un país donde la movilidad social es controlada por el estado por lo que el crecimiento y caída del virus fue rápido.
El objetivo del cierre en México fue contener la enfermedad y no saturar los hospitales pero esta palabra no significa el no contagio sino más lento el crecimiento y se tuvo éxito, no existen saturaciones de hospitales en la gran mayoría de los estados, los picos en Europa y en Estados Unidos fueron en mes y medio y en México van tres meses y no llega. El cierre de la economía no puede durar más tiempo, familias, empresas y gobiernos agotaron sus reservas al punto que ya cualquier préstamo es impagable por los costos fijos acumulados, hoy le toca al estado trasladar la responsabilidad de la salud a la sociedad y no puede negarle el derecho a ganarse el ingreso personal para la alimentación y demás gastos familiares, reitero el papel del estado en estos momentos es generar la cultura, hábitos personales y sociales para mitigar el contagio sin sacrificar el derecho del ingreso familiar y pasar rápidamente a la “nueva normalidad” y con ello la sustentabilidad económica de la sociedad.
Cerrar la economía en estos momentos por una enfermedad que va a durar meses provocaría también consecuencias de salud en la sociedad, generaría más enfermedades que la pandemia misma, como depresión, suicidios, problemas cardiacos y falta de dinero para poder comprar medicinas para otras enfermedades como el cáncer, diabetes, hipertensión y otras recurrentes. Es más efectivo, humano y barato habilitar hoteles como hospitales con todos los equipos para posibles infectados que llevar a miles de familias y gobiernos a la pobreza y bancarrota.
Cerrar la economía después de tres meses significaría generar un ciclo perverso de menos ingresos públicos y privados que provocaría menos consumo, menos empleo y más pobreza a largo plazo. Son importantes y bienvenidos seguros de desempleo, despensas y prorrogas pero no hay programa social e ingreso público que substituya a la economía o cubra la totalidad del consumo nacional, todo el presupuesto del gobierno federal, estatal y municipal solo representa el 17% del PIB nacional.
Sin embargo las ayudas solicitadas por organismos sociales y el propio gobierno apuntan a crédito y prórrogas de compromisos fiscales y bancarios pero eso disfraza el problema estructural que afronta la desigualdad económica del país. Los esfuerzos de los gobiernos están orientados al estudio y atención de la pobreza y sus consecuencias, nadie estudia la concentración de la riqueza y su origen. El desarrollo y movilidad empresarial de las pymes que concentran más del 90% de las empresas del país está estancado por varias circunstancias estructurales pero considero que 3 objetivos o banderas deben enarbolar las agendas para la generación de empleo inmediato, estas son.
1) No puede haber crecimiento sin industria, México siempre ha sido exportador de petróleo y materias primas hacia el mundo, el verdadero desarrollo económico estriba en la industrialización de las mismas, se necesita estudiar el comercio internacional en busca errores en aranceles y oportunidades del mercado. La apertura económica salvaje llevo la introducción de productos a México donde de origen vienen subsidiados causando una competencia injusta, ejemplo, los costos de muchos países asiáticos son pagados por el estado como la energía, empleo sin prestaciones o contaminando el medio ambiente llevando productos al mundo a precios más bajos.
2) Crédito; México es de los países con menos bancos por habitante, la sobre regulación en su creación, la eliminación de la Sofomes y la satanización del efectivo ha llevado a una mayor economía informal menos captación fiscal y menos crédito para el desarrollo de las pymes provocando comisiones altas y que los bancos mexicanos sean de los más rentables del mundo.
3) La liquidez y la dispersión geográfica de compras por parte del gobierno en los tres niveles, un tema que importa mucho en momentos de crisis, la centralización de compras en los estados y gobierno federal ha provocado una concentración del capital por décadas y eso tiene origen porque los ingresos estatales y municipales provienen mayoritariamente de la Secretaria de Hacienda y no del IVA o ISR de las empresas establecidas dentro del estado, prácticas como comprar productos nacionales y dividir compras para revitalizar de liquidez y estén al alcance de pymes debe ser una prioridad pero lo más importante es el pago oportuno a los proveedores ya que de nada sirve comprar sin pagar a tiempo más aún donde México es el único país en TMEC donde se paga el ISR sobre lo facturado y no sobre lo cobrado, no pagar a tiempo significa asfixiar y discriminar a las pymes, alzas de precios y concentración económica.
Los gobiernos socialistas o liberales han caído no por sus intenciones o agendas sino por crisis económicas de origen interno o externo que tocan los más esencial de una sociedad sana; la estabilidad del empleo y el ingreso familiar.
La reapertura económica debe ser acelerada y el Estado debe solamente generar la cultura y establecer las normas de la nueva normalidad pero prohibir el derecho al trabajo y obtener un ingreso en estos momento significaría un colapso social que vulnera el derecho humano a sobrevivir, sin embargo, este es el momento oportuno para enfrentar los verdaderos problemas del desarrollo económico y no soluciones temporales de gasto y financiamientos que no llevan un desarrollo económico efectivo y a largo plazo.
