El gobierno federal, bajo el liderazgo de la presidenta Claudia Sheinbaum, anunció una estrategia para recuperar la industria farmacéutica nacional mediante la promoción de producción de medicamentos genéricos y apoyo a fabricantes con plantas en México. Se emitió un decreto que antes de las futuras licitaciones para 2027-2028 dará puntos adicionales a laboratorios con instalaciones nacionales, promoviendo inversión local y investigación en productos biosimilares .
En conferencia de prensa se informó que se liberarán alrededor de 385 patentes, lo que permitirá a laboratorios mexicanos producir genéricos una vez vencidos los derechos exclusivos . Además, autoridades del IMSS‑Bienestar señalaron que México depende en más de un 80 % de insumos importados, por lo que fortalecer la soberanía sanitaria es urgente .
A la estrategia se suma una inversión pública-privada superior a 10 480 millones de pesos anunciada el 3 de julio de 2025, destinada a ampliar infraestructura, maquinaria, producción biotecnológica y una planta de fraccionamiento de plasma, única en América Latina . Este impulso también estará respaldado por la digitalización de trámites regulatorios, agilización de permisos de COFEPRIS y CIMPI, y facilidades para ensayos clínicos .
Esta política responde a una dependencia histórica de medicamentos importados tras la eliminación en 2008 del requisito de planta nacional, lo que debilitó la industria local. El gobierno busca revertir ese retroceso fortaleciendo la cadena nacional de valor, creando empleos y bajando costos para los pacientes .
En conjunto, la medida busca aumentar la autosuficiencia farmacéutica del país, generando un entorno más competitivo y sostenible para garantizar abasto, reducir precios y posicionar a México como proveedor regional de medicamentos.