La inflación en México mostró una desaceleración significativa al ubicarse en 3.67% al cierre de la primera quincena de marzo de 2025, según el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este descenso se debe, en gran medida, a la reducción en los precios de los alimentos, especialmente en frutas y verduras, que registraron una disminución anual del 3.67%. Por otro lado, los productos pecuarios presentaron un incremento del 8.93% en el mismo periodo.
La inflación subyacente, que excluye bienes y servicios con precios más volátiles, también mostró una tendencia a la baja, situándose en 3.56% anual, su nivel más bajo desde mayo de 2020.
Estos resultados han superado las expectativas de analistas financieros, quienes proyectaban una inflación del 3.71% para este periodo. La cifra actual refuerza la posibilidad de que el Banco de México reduzca la tasa de interés de referencia al 9% en su próxima reunión, con el objetivo de estimular la economía y acercarse a la meta inflacionaria del 3%.
Es importante destacar que la desaceleración de la inflación brinda un alivio a la economía mexicana, especialmente en un contexto donde la actividad económica mostró una contracción del 0.2% en enero respecto a diciembre, según datos recientes.