Ismael “El Mayo” Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, ha solicitado formalmente su repatriación a México, argumentando que Estados Unidos carece de legitimidad para imponerle la pena de muerte. Desde su celda, el capo de 77 años afirmó que su detención fue irregular y acusó a Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, de secuestrarlo y entregarlo a las autoridades estadounidenses. Zambada instó al gobierno mexicano a intervenir para evitar un precedente peligroso en las relaciones bilaterales, argumentando que podría abrir la puerta a que otros ciudadanos mexicanos sean procesados en EE.UU. sin un procedimiento adecuado. La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que analizará la solicitud, subrayando la importancia del derecho a un juicio justo y destacando la soberanía mexicana. Zambada, quien posee información valiosa sobre el narcotráfico, podría estar considerando cooperar con la justicia a cambio de una pena reducida. Esta situación se produce en un contexto de tensiones diplomáticas y la reciente designación de seis cárteles mexicanos como grupos terroristas por parte de la administración estadounidense.
La captura de Zambada en julio de 2024, junto con Joaquín Guzmán López, generó un gran impacto mediático y político en México. La detención, libre de violencia, suscitó teorías y polémicas sobre la influencia del Cártel de Sinaloa y aumentó las tensiones entre México y Estados Unidos. La situación se complicó con el asesinato del político Héctor Cuén y desató una serie de acusaciones de traición, especialmente entre las facciones del cartel. El abogado de Zambada alegó que su cliente fue secuestrado y entregado a EE.UU.
La presidenta Sheinbaum detalló que el delito de terrorismo en México “tiene connotaciones con derribar o derrocar a un gobierno”. Además, puntualizó que el gobierno mexicano analizará la solicitud de Zambada, subrayando la importancia del derecho a un juicio justo y destacando la soberanía nacional.
La situación ha generado un debate sobre la cooperación entre México y Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico y la extradición de líderes criminales. Mientras tanto, Zambada permanece bajo custodia en Estados Unidos, a la espera de una decisión sobre su solicitud de repatriación.


