La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México ha anunciado la conformación de una delegación de senadores que viajará a Estados Unidos con el objetivo de dialogar con legisladores y funcionarios estadounidenses para evitar la implementación de un impuesto del 5% a las remesas enviadas por migrantes. Esta medida, propuesta por legisladores republicanos, ha generado preocupación debido al impacto económico que tendría en millones de familias mexicanas que dependen de estos recursos.
Delegación mexicana
El canciller Juan Ramón de la Fuente encabezará la delegación, que incluye a senadores de diversos partidos políticos: Ignacio Mier, Alejandro Murat y Andrea Chávez de Morena; Cristina Ruíz Sandoval del PRI; Amalia García de Movimiento Ciudadano; Mauricio Vila del PAN; Ruth González Silva del PVEM; y Geovanna Bañuelos de la Torre del PT. Aunque no se ha especificado la fecha exacta del viaje ni la agenda detallada, se espera que las reuniones se centren en persuadir a los legisladores estadounidenses de los efectos negativos que tendría la imposición de este gravamen.
Contexto de la propuesta
La propuesta de gravar las remesas con un 5% fue inicialmente frenada el 16 de mayo de 2025 por legisladores republicanos en Estados Unidos. Sin embargo, el plan fue reactivado recientemente en un comité clave del Congreso, lo que ha reavivado las preocupaciones en México. La presidenta Claudia Sheinbaum ha calificado la medida como “inaceptable” y “discriminatoria”, argumentando que los migrantes ya contribuyen significativamente a la economía estadounidense y que un impuesto adicional representaría una doble tributación.
Importancia de las remesas
Las remesas son una fuente vital de ingresos para México. En 2024, el país recibió más de 64.745 millones de dólares en remesas, superando las exportaciones agrícolas, turísticas y petroleras. Más del 52% de los beneficiarios de estas remesas vive en zonas rurales marginadas, lo que subraya la importancia de estos recursos para las comunidades más vulnerables.
Reacciones y acciones diplomáticas
Además del viaje de los senadores, el gobierno mexicano ha iniciado una ofensiva diplomática que incluye el envío de cartas a congresistas estadounidenses y reuniones con comunidades mexicanas en EE. UU. para explicar las consecuencias de la medida. La presidenta Sheinbaum ha instado a los migrantes, independientemente de su estatus migratorio, a expresar su oposición escribiendo a sus representantes.
Por su parte, un grupo de 24 congresistas hispanos demócratas en EE. UU. ha enviado una carta al líder de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, pidiendo detener la propuesta de imponer un impuesto del 5% a las remesas, argumentando que es injusta y perjudicial para millones de inmigrantes.