La presidenta electa Claudia Sheinbaum propuso reformas a la Ley de la Guardia Nacional que permitirían enviar a sus agentes a conflictos armados internacionales. Esta propuesta forma parte de un paquete legislativo anunciado tras su victoria electoral.
Entre los puntos más destacados del proyecto está la posibilidad de que integrantes de la Guardia participen en tareas de defensa exterior, algo que actualmente no permite la legislación vigente. Además, se establece una pena de hasta 60 años de prisión por deserción en tiempos de guerra o alteración del orden interno.
La iniciativa ha sido criticada por especialistas en derechos humanos y por sectores de la oposición, que temen una militarización mayor de la vida pública y el uso de la fuerza armada para fines políticos.
El paquete de reformas será enviado al Congreso en septiembre, cuando inicie la nueva legislatura, con mayoría de Morena y sus aliados.