La vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, llegó este miércoles a Quito tras haber permanecido en Turquía luego de su suspensión por 150 días impuesta por el Ministerio del Trabajo. En declaraciones ofrecidas en el aeropuerto, Abad denunció que durante su tiempo en Ankara vivió en condiciones de aislamiento y calificó la medida en su contra como “abrupta, ilegal e ilegítima”.
“He estado casi encadenada, encerrada prácticamente, en un hotel en Turquía, en Ankara”, afirmó Abad, quien fue suspendida de sus funciones bajo el argumento de haberse ausentado injustificadamente de su cargo como embajadora de Ecuador en ese país.
Verónica Abad fue designada en diciembre como embajadora extraordinaria y plenipotenciaria por el presidente Daniel Noboa, residiendo inicialmente en Israel. Sin embargo, debido al conflicto en Gaza, fue trasladada en septiembre a Ankara por razones de seguridad. Según el Ministerio del Trabajo, Abad no se presentó en la embajada de Ecuador en Turquía en la fecha estipulada, lo que llevó a su sanción.
En su regreso, la funcionaria rechazó la suspensión, asegurando que ha sido víctima de una ruptura constitucional y acusando al gobierno de atentar contra la independencia de poderes. “Hoy he venido con mis propios recursos en un acto de rebeldía ante todo lo que está aconteciendo en el Ecuador”, declaró.
Abad informó que uno de sus principales motivos para regresar a Ecuador es estar cerca de su familia, pero también señaló la importancia de asistir a la audiencia programada para el 27 de noviembre, donde apelará la suspensión.
Mientras tanto, el presidente Daniel Noboa designó a Sariha Moya como vicepresidenta encargada. Moya, quien eventualmente asumirá la presidencia interina durante la campaña electoral de Noboa, reemplaza a Abad durante los 150 días de suspensión.
Las tensiones entre Noboa y Abad no son nuevas. Desde el inicio del gobierno, el 23 de noviembre de 2023, ambos han mostrado una relación conflictiva. Noboa incluso ha acusado a su vicepresidenta de intentar destituirlo mediante recursos legales.
Por el momento, la Presidencia de Ecuador no ha emitido un pronunciamiento sobre las declaraciones de Abad. Según CNN, se ha solicitado una reacción oficial, pero aún no hay respuesta.
La situación refleja una creciente división en la cúpula del poder en Ecuador, lo que podría complicar aún más el panorama político del país.
