La Revista

Los extremos: #paquete económico 2019

Especial La Revista
Especial La Revista
Sígueme en redes sociales:

Por: Manuel Guadarrama*.

En cumplimiento a la Constitución, el
presidente de la República envió a la Cámara de Diputados el Paquete Económico
para el primer año de su gestión. La propuesta incluye la visión del entorno
económico para 2019, cuánto esperan recibir, cuánto estiman gastar y cuánto
pretenden endeudarse.

De acuerdo con los Criterios Generales de
Política Económica pasamos de tener cifras que históricamente subestimaban los
ingresos y gastos a un Paquete Económico que puede caer en un optimismo
desmesurado. Destaca y preocupa el contexto previsto por el Gobierno federal en
2019:

Bajo crecimiento económico: a nivel
mundial se espera crecer 3.7%. En un inicio, el Gobierno había estimado un
crecimiento de 4% para México, sin embargo, del dicho al hecho, se terminó
esperando solo un 2%.

¿Estimaciones realistas?: la inflación
esperada es de 3.4%, no obstante a lo largo del año puede enfrentar presiones
adicionales. Lo mismo sucede con la tasa de interés en 8.3%, que no parece que
pueda mantenerse en un entorno económico adverso.

¿Ingresos
de papel?

La mala práctica continúa, se generan
ingresos al manipular el precio del barril y el tipo de cambio. El precio del
barril de petróleo se consideró 4 dólares arriba de la estimación previa. A
pesar de tener un expectativa a la baja, se pasó de 51 a 55 dólares por barril.
Lo mismo sucede con el tipo de cambio que originalmente se estimó en 18.4 y
terminó en 20 pesos por dólar.

Mala noticia: se desconocen aún los
efectos de la disminución en tasas de impuestos como el IVA en la frontera u
otras medidas o tasas preferenciales en la recaudación del ISR. Habrá que
esperar no solo las memorias de cálculo, sino los decretos presidenciales que establezcan
dichas medidas, ya que la Iniciativa de Ley de Ingresos todavía no las
contempla. Otro tema que resalta es la composición de los ingresos, pues el
sexenio pasado alrededor del 70% provenían de impuestos, ahora se estima que
los ingresos tributarios representen el 62%.

Buena noticia: el nivel de ingresos es más
consistente en términos de planeación presupuestaria. Esto es, la subestimación
de ingresos sistemática del Gobierno federal anterior era cercana al 12%. Ese
colchón de miles de millones de pesos en la práctica implicaba un margen de
discrecionalidad de los recursos públicos. Ahora, la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público (SHCP) estimó ingresos muy cercanos a lo que se recibía.

Gasto…
¿Cuál austeridad?

Del 1.5% de gasto adicional que se había
estimado en los precriterios de política económica, se terminó con un 6.1%
respecto a 2018. En términos monetarios, la cifra supera los 350,000 millones
de pesos, es decir, el 70% de lo que se planteaba ahorrar por las medidas de
austeridad. Un aspecto positivo en esta propuesta de presupuesto es considerar
un superávit primario que refleja la capacidad del sector público para hacer
frente a sus compromisos, aunque el margen del Gobierno cada vez sea más
reducido.

Ganadores: las secretarías de Bienestar
(39.24%), Trabajo y Previsión Social (971%), Energía (1002.3%), Turismo (124%)
y Defensa Nacional (15.61%) tienen las mayores variaciones a la alza en
asignación de recursos públicos.

Perdedores: los órganos autónomos, el
Instituto Nacional Electoral (-32.63%), el Instituto Federal de
Telecomunicaciones (-10.91%), el Instituto Nacional de Transparencia (-14.69%),
la Comisión Reguladora de Energía (-28.43%) , la Comisión Nacional de
Hidrocarburos (-27.62%) son entes públicos que se estima disminuyan su
presupuesto asignado en 2019, entre otros.

Pendientes: el Ramo 23 propone la
disminución de recursos en fondos opacos como el Fortalecimiento Financiero.
Sin embargo, dejó pendiente su rediseño para introducir criterios de
competencia que mejoren la recaudación y el gasto en los estados y municipios.
Otro tema controvertido es el aumento en comunicación social. Si bien existe un
aumento de 34.90% en la propuesta del Presupuesto de Egresos de la Federación
(PEF) en relación con el PEF 2018, lo cierto es que en el sexenio de Enrique
Peña Nieto se subestimó sistemáticamente este gasto (en promedio tuvo una
variación a la alza de 237% respecto a lo aprobado). Habrá que estar muy
pendientes de que el Gobierno se apegue a lo presupuestado.

Deuda

La necesidad de recursos ocasionará que la
deuda permanezca muy cercana a los niveles de 2018. Es decir, se estima que la
deuda requerida del sector público en 2019 sea equivalente al 2.5% del PIB. Un
dato relevante es que las asignaciones de recursos al costo financiero suban un
14.76% y los Adeudos de Ejercicios Fiscales Anteriores un 65%.

El mayor reto será mantener los niveles de
endeudamiento sin que en conjunto se limite el margen de actuación de la
Administración.

En resumen, es evidente la alineación de
otros poderes, el Legislativo proyectó una reducción de su presupuesto en un
16.5% y el Judicial un 8.5%, y órganos autónomos a la “política de austeridad”.
El nivel de ingresos y gastos de inicio parecen más consistentes y realistas en
términos de planeación presupuestaria.

Preocupa la falta de una política clara de
crecimiento económico y el optimismo en las estimaciones de ingresos
(considerando el contexto económico y las propias medidas anunciadas por el
Ejecutivo federal). Por otro lado, no es una sorpresa que el Proyecto de
Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 tenga proyectos prioritarios con
un énfasis asistencialista; lo alarmante es asignar recursos a programas de
desarrollo social con poca o nula evaluación, sin reglas de operación y
capacidad administrativa rebasada.

*Manuel
Guadarrama

Coordinador
de Finanzas Públicas del @IMCO

Especial La Revista
Especial La Revista
Sígueme en redes sociales:

No quedes sin leer...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img

Lo último