Por: Cristina Padín.
Cristina era la mayor de aquel grupo. Intuía las cosas y adoraba la guitarra y el flamenco, también el toreo y las calas plateadas y azules de Galicia. Leía mucho.. y detestaba al que crea un problema donde no lo había..
Santiago deseaba que su nombre estuviera asociado al del Apóstol. Era adolescente de ley… ser de música de Tanxugueiras y ser de lecturas épicas y fantásticas. Amaba a otro chico y era respetuoso y amante del mar…
Luis era el pequeño de la pandilla. Comía a gusto frambuesas y chocolate con nuez. Le gustaba andar en bicicleta, también los perros. Y ver los amaneceres de abril, leer cómics, estudiar mucho. Disfrutaba mucho las vacaciones.
Ana era una princesa de rizos dorados. Muy trabajadora. Amiga de los juegos de letras y de los retos de ingenio. Bondadosa y noble, escuchaba tanto a Camilo como al gran Alejandro Sanz. No la había más generosa. Siempre sonriente..
Marta jugaba al fútbol. Hacía teatro. Veía a El Juli y Roca Rey. Viajaba todo lo que podía a su edad adolescente. Tenía novio y besaba sus besos. Escribía poemas. Vestía de rojo y de blanco en verano. Le gustaba la piscina..
Natalia era fuerza y entrega. Sabía cocinar. Poseía una mirada muy linda. Ojos del color de la miel. Era niña de buenas notas, leía cuentos. Buena amiga y mejor consejera. Le agradaba mucho el sur. Bailaba y apreciaba las rosas y los claveles.
Luis cumplía años el 25… los demás festejaban su santo en esos días…
A cada Cristina, Santiago, Natalia, Marta y Ana
A mi Ana, mi Natalia y mi Marta
A Cris
A mi Luis
Al 25 de julio: día grande de España
A Tanxugueiras
A la gente de verdad
A Alejandro Sanz
A la gente que no busca problemas donde no las hay