La madrugada del jueves 3 de julio de 2025, el delantero portugués del Liverpool FC, Diogo Jota, de 28 años, y su hermano menor, el futbolista André Silva, de 25, fallecieron en un accidente de tráfico ocurrido en la autovía A‑52, a la altura del municipio de Cernadilla, en la provincia de Zamora, España.
El siniestro se produjo aproximadamente a las 00:40 CEST, cuando el Lamborghini Huracán en el que viajaban sufrió lo que la Guardia Civil describe como “un reventón de neumático mientras realizaban un adelantamiento”. El vehículo salió de la vía, chocó contra un terraplén y se incendió, cobrándose la vida de ambos hermanos en el acto.
Diogo Jota –cuyo nombre real era Diogo José Teixeira da Silva– había contraído matrimonio con su novia de toda la vida, Rute Cardoso, el 22 de junio de 2025, apenas once días antes del accidente. Pocos días después, la pareja dio la bienvenida a su tercer hijo.
Investigaciones preliminares confirmaron que el delantero, campeón de la Premier League 2024‑25 con el Liverpool, había evitado volar por consejo médico tras una operación pulmonar reciente. En esa etapa se dirigía a través de España hacia Santander, para tomar un ferry que lo llevaría de regreso a Inglaterra junto con su hermano, quien jugaba en el Penafiel de la Segunda División portuguesa
El impacto en el mundo del fútbol fue inmediato. El Liverpool FC se declaró “devastado” y pidió respeto hacia la familia en un comunicado. El entrenador Arne Slot expresó su dolor, afirmando que Jota era “un ser humano único” y que el club lo recordará “como un compañero querido”.
Las reacciones no se hicieron esperar: Cristiano Ronaldo, compañero en la selección portuguesa, manifestó que “no tiene sentido” esta pérdida. El exentrenador Jürgen Klopp expresó sus “oraciones, pensamientos y fuerza” para la familia. Tanto la UEFA como la FIFA decretaron un minuto de silencio en memoria de los hermanos, y en estadios como Anfield, Molineux y durante el entrenamiento del Bayern, se rindieron honores con silencios y homenajes.
En Portugal, los restos de ambos jugadores fueron recibidos con honores en Gondomar y Porto. Numerosas autoridades, entre ellas el primer ministro Luis Montenegro y el presidente Marcelo Rebelo de Sousa, asistieron al funeral celebrado el sábado 5 de julio en la Igreja Matriz de Gondomar, en una emotiva ceremonia marcada por la presencia de familiares, amigos y figuras del deporte.
Diogo Jota deja un legado deportivo destacado: disputó 182 partidos y anotó 65 goles con el Liverpool, contribuyendo a la obtención de la Premier League, una FA Cup y dos Copas de la Liga. Internacional con Portugal, había ganado la Nations League en 2019 y 2025. Su hermano André, figura emergente del fútbol portugués, militaba en el Penafiel, donde sumó 12 goles y 10 asistencias en 105 encuentros. Ambos eran admirados por su calidad humana y profesionalismo.
Así concluye una historia que enluta al deporte y conmueve a millones: la trágica e inesperada pérdida de dos jóvenes talentos portugueses en plena forma, apenas días después de celebrar un nuevo capítulo familiar.
